Comunicación con la persona dependiente

Tiempo de lectura: 1 min

Una buena comunicación favorece, tanto el bienestar de la persona cuidadora, como el de la que es cuidada. Es muy importante procurar mantener una comunicación lo más fluida posible, para ello:

  • Elegir el momento adecuado para hablar y en un ambiente tranquilo.
  • Escuchar atentamente y mostrar interés. No restar importancia a sus expresiones.
  • Observar a la persona para detectar cuál es su estado emocional, cuáles son sus necesidades.
  • Buscar temas de conversación interesantes para la otra persona.
  • Utilizar un lenguaje sencillo y volumen adecuado.
  • Utilizar un tono amable y sonríe.
  • Respetar el tiempo que la persona necesita  para comprender lo que le decimos y para responder.
  • Sentarse al lado o enfrente y, si es posible, a la misma altura y hablar mirando a los ojos de la otra persona.

En ocasiones cuando existe un deterioro físico o cognitivo la comunicación verbal resulta difícil o imposible. En este momento se enfatizará la comunicación gestual o corporal.

  • Mantener el contacto físico y visual.
  • Abrazar, acariciar, sonreír. Transmitir afecto reconforta a la persona cuidada.
  • Escuchar de forma activa, centrarse en las necesidades del otro.

 

Mantente al día sobre este contenido

Suscríbete para recibir información sobre las últimas actualizaciones relacionadas con este contenido.

¡Gracias por tu suscripción!

Si es la primera vez que te suscribes recibirás un mail de confirmación, comprueba tu bandeja de entrada.

Ha ocurrido un error y no hemos podido enviar tus datos, por favor, vuelve a intentarlo más tarde.