Vivir con Cáncer de Colon y Recto

Efectos secundarios. La mayoría de los efectos secundarios de la quimioterapia o de la radioterapia suelen desaparecer al finalizar el tratamiento. Estos síntomas se tratan con medicación a medida que aparecen: náuseas, diarreas, vómitos, irritaciones cutáneas en manos y pies.

La realización de una abertura (estoma) digestiva, en el caso de una colostomía o ilestomia (abertura en la barriga que se hace para una cirugía), se considera un efecto secundario de la intervención quirúrgica. En estos casos, en el centro hospitalario se dan las indicaciones pertinentes para su manejo, tanto si esta es de manera temporal o permanente.

Alcohol. Durante la quimioterapia es importante no tomar bebidas alcohólicas. Después de la intervención quirúrgica y, si no se realiza ningún otro tratamiento complementario, se puede tomar alcohol siempre que sea de manera moderada.

Tabaco. Es importante intentar dejar de fumar, ya que su consumo empeora los efectos secundarios de los tratamientos y la buena cicatrización de los tejidos, en caso de intervención quirúrgica.

Alimentación. No existe ninguna evidencia científica que desaconseje la ingesta de proteínas o azúcares si se tiene cáncer. No hay ningún alimento prohibido, excepto en escasas ocasiones por interacciones con el fármaco.

Es recomendable comer lo que apetezca en pequeñas cantidades 4-5 veces al día. Lo importante es mantener la masa proteica corporal y no perder mucho peso.

Durante el tratamiento se han de tomar alimentos que sean fáciles de digerir y una dieta no demasiado rica en fibra, para evitar gases, distensión abdominal y posibles diarreas.

Posteriormente a la intervención, se introducirán todos los alimentos de forma gradual para establecer de forma natural el nuevo patrón deposicional. La única diferencia para los pacientes portadores de estomas digestivas es que la introducción será más lenta y controlada.

Ejercicio. Se puede realizar ejercicio físico durante y después del tratamiento, siempre que sea moderado y adecuado a la edad de la persona.

Cuando se está bajo tratamiento de quimioterapia se han de evitar realizar actividades acuáticas para mantener los catéteres en buen estado y disminuir el riesgo de infección. Por otra parte, se ha de evitar la exposición al sol y siempre aplicar crema  solar de protección total (+50), aunque no sea verano, para evitar problemas de la piel.

Después de la intervención quirúrgica, se ha de esperar como mínimo un mes para hacer actividades que utilicen las abdominales como cargar peso (bolsas de la compra, botellas de agua de 5l o más, hacer abdominales, pilates, yoga,…) o practicar natación, entre otras. Por el contrario, es importante caminar a ritmo rápido, de manera diaria, para mantener la musculatura de las piernas en buen estado y ritmo deposicional.

Sueño. Es importante descansar entre 6-8 horas. No hay que preocuparse si durante el tratamiento de quimioterapia y el primer mes después de la intervención quirúrgica se duerme más, ya que el cuerpo está en un proceso estresante y, por tanto, puede necesitar más reposo del habitual. Se ha de tener en cuenta que la recuperación es más lenta en función de la edad del paciente.

Sexualidad. Se pueden mantener relaciones sexuales si el estado general lo permite. Hay que recordar que las mujeres en edad fértil deben tomar medidas de protección para evitar el embarazo durante el tratamiento.

Viajes. No hay ninguna contraindicación para viajar durante la enfermedad, simplemente que se ha de tener en cuenta la programación de las sesiones de quimioterapia.

Apoyo social y emocional. Existen diferentes grupos de apoyo de pacientes y familiares que asesoran y ayudan a otras personas que han pasado por una situación similar. Se recomienda preguntar por este tipo de entidades en el centro de salud.