El programa se basa en tres ejes centrales: un seguimiento telefónico después de cada dosis con un cuestionario estructurado; la habilitación de un correo electrónico institucional para la resolución de dudas relacionadas con efectos adversos; y la implementación de un circuito coordinado de manejo asistencial de reacciones adversas.
En el Hospital Clínic se puso en marcha en enero, de la mano de los Servicios de Medicina Preventiva y Epidemiología y de Salud Laboral, la campaña de vacunación frente a la COVID-19 a profesionales sanitarios. Desde entonces, se ha vacunado a más de 5.000 profesionales y, también, a 1.000 pacientes trasplantados.
Los datos preliminares del seguimiento revelan resultados tranquilizadores, ya que las reacciones adversas detectadas encajan dentro del perfil de seguridad esperable descrito en los ensayos clínicos. Las reacciones adversas detectadas con mayor frecuencia son: fiebre, dolor en brazo, cefalea, malestar general y adenopatías. Son por tanto no graves, aunque a veces de intensidad notable. La mayor parte de síntomas asociados a estas reacciones adversas suelen ceder a los pocos días de forma espontánea y son manejables con tratamiento sintomático. Se han detectado algunos casos aislados de reacciones más graves, aunque en ninguna de ellas se ha visto comprometida la vida de la persona vacunada.
El programa todavía está activo, y hasta el momento ha implicado una importante inversión de recursos y esfuerzo por parte del Servicio de Farmacología Clínica y el Comité Técnico de Farmacovigilancia, con un importante número de profesionales vacunados seguidos entre enero y marzo de 2021. Se prevé que en unos meses estén disponibles los resultados finales de este seguimiento activo de la seguridad.