Preguntas frecuentes sobre el Asma

El asma es una enfermedad crónica y no tiene una cura definitiva. El tratamiento permite que, en la mayoría de los casos, se pueda controlar y tener una vida normal, sin limitaciones.

El asma tiene un componente genético, pero eso no significa que en todos los casos se tenga que heredar de padres a hijos. El desarrollo del asma depende, además, de la predisposición genética, de los factores del desarrollo y factores medioambientales.

Aunque el asma es muy frecuente en la población infantil, se puede manifestar a cualquier edad.

No necesariamente. Tener alergia es un factor de riesgo para desarrollar asma. Sin embargo, hay muchas personas alérgicas que no tienen asma y muchas personas asmáticas que no son alérgicas.

Sí. El ejercicio físico está recomendado para los pacientes con asma siempre y cuando esté controlada. En el asma inducida por el ejercicio es recomendable tomar un broncodilatador de acción rápida 10-15 minutos antes de iniciar la actividad y procurar hacer deporte en lugares libres de contaminación ambiental.

Sí. Siempre y cuando el asma esté bien controlada. Recuerda llevar suficiente medicación para el viaje y llevar un plan de acción en caso de empeoramiento de síntomas del asma.

Nunca se debe suspender el tratamiento por iniciativa propia sin previa recomendación del médico. La interrupción del tratamiento puede desencadenar una crisis de asma.

Los corticoides tomados por vía inhalada realizan su acción a nivel local, en las vías aéreas y el efecto que tiene en el resto del cuerpo es mínimo. Así, que no debes tener miedo a engordar.

Debes seguir las recomendaciones del centro donde se la vaya a realizar. No se debe fumar antes su realización y, por lo general, no se realiza el tratamiento broncodilatador previo a la prueba.

Un plan de acción es un conjunto de recomendaciones y estrategias que te da el médico, por escrito, para ajustar la medicación, en caso de empeoramiento de los síntomas, y evitar sufrir una crisis asmática.

Sí. La gravedad de las crisis asmáticas es muy variable e, incluso, puede mejorar con el tratamiento en casa. Pero, en ocasiones, la crisis puede ser grave, desarrollarse con gran rapidez y poner en riesgo la vida del paciente. Por lo que es importante conocer los signos de alarma y seguir el plan de acción.

Los glucocorticoides inhalados son la piedra angular del tratamiento, su uso evita las crisis y controla los síntomas del asma. Son medicamentos que han cambiado radicalmente el curso natural de la enfermedad.

No debes suspender el tratamiento. Una tercera parte de las mujeres embarazadas con asma pueden empeorar durante el embarazo. Debes consultar al médico y hacer controles más frecuentes. Si estás bien controlada, el riesgo para ti y para el bebé es muy bajo.

Eso depende a lo que tengas alergia. Por ejemplo, si tienes alergia a los ácaros y cambias de residencia a zonas altas que no sean húmedas, probablemente mejorarás. Pero cada caso es variable.

Hay un aumento de frecuencia en la sintomatología como tos, escucha de pitos, opresión en el pecho o falta de aire al hacer algún esfuerzo. A veces, los síntomas pueden empeorar por las noches.

No, es una creencia equivocada. No tiene ningún mecanismo para crear dependencia a los pacientes.

El tratamiento consiste en administrar de forma creciente aquellas sustancias a las cuales se es alérgico. El tratamiento dura alrededor de 3-5 años y puede mejorar o casi curar las alergias.

Algunos asmáticos tienen intolerancia a los antiinflamatorios no esteroideos (AINES), como la aspirina, que pueden desencadenar una crisis de asma. Pero la mayoría de los pacientes, los toleran bien. Consulta con tu médico en caso de requerirlos.

Es probable que tengas un mal control de la enfermedad y, además, puedes incrementar el riesgo de sufrir otra enfermedad respiratoria que afecta los bronquios como es la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica). 

Como su nombre indica, los broncodilatadores dilatan los bronquios al relajar la musculatura que los rodea, lo que reduce la obstrucción y facilita la respiración.