En estos tres años, y después de ocho oleadas, se han atendido en el Clínic a más de 14.000 personas por COVID-19 de las cuales más de 8.000 han sido ingresadas en el hospital y cerca de 1.900 han requerido estar en la UCI.
En cuanto al laboratorio, el Servicio de Microbiología del Centro de Diagnóstico Biomédico (CDB) ha procesado en este tiempo cerca de 435.000 pruebas PCR para detectar el SARS-CoV-2, más de 9.300 pruebas PCR para detectar COVID-19 y la Gripe A y B y cerca de 9.800 antígenos (quimioluminiscencia) para COVID-19.
El Clínic puso en marcha un Comité de crisis para la COVID-19 al inicio de la pandemia y, después de casi tres años de reuniones ininterrumpidas, y gracias a la situación epidemiológica actual, ha dejado de reunirse. El Dr. Antoni Castells, director médico del hospital y coordinador del Comité, explica que "después de más de 1.000 días, hemos aprendido a diagnosticar y tratar mejor la enfermedad y hemos establecido los protocolos para su cribado, prevención y control". Y agradece “la dedicación, el compromiso y la ayuda de todas las compañeras y compañeros que han participado en el comité de crisis a lo largo de este tiempo, y la confianza y respeto de todos los profesionales de la casa hacia las decisiones tomadas y su colaboración en todo momento”.
Ocho oleadas, ocho situaciones diferentes
Este año, el invierno presenta una situación epidemiológica complicada, distinta a la de los tres últimos años. Hay casos de VRS (el virus causante de la bronquiolitis), de COVID-19, de gripe (mayoritariamente por el virus A(H3N2)) y los resfriados habituales (rinovirus): una verdadera sopa de virus.
Se ha superado la fase más grave y crítica de la pandemia, pero todavía existe COVID-19. Aún hay casos, también hay más reinfecciones y más consultas e ingresos – debido a las subvariantes de Òmicron dominantes ahora-, pero pocos casos son graves.
El Clínic fue el hospital de referencia en Cataluña para el diagnóstico y atención de los casos sospechosos de COVID-19 al inicio de la pandemia. Los profesionales y las estructuras del hospital se fueron adaptando a las nuevas situaciones y los nuevos protocolos para dar respuesta a la situación de emergencia. Desde las UCIs y las salas, hasta quirófanos y laboratorios.
Variantes y vacunas
El virus de la COVID-19 en estos tres años ha ido evolucionando y en la actualidad la variante predominante es Ómicron (las variantes BQ1.1, BQ.1 y BA.5).
Ahora se ha identificado una nueva variante de Ómicron: la variante XBB apareció a partir de la recombinación o intercambio de parte de su material genético de dos variantes Ómicron. Ahora, una mutación ha dado origen a la variante XBB.1.5, detectada por primera vez en octubre de 2022 en EEUU, que es nueva, pero sigue siendo Ómicron.
Por el momento se comporta clínicamente como las variantes Ómicron. En EEUU, ha mostrado mayor transmisibilidad y mayor capacidad de causar reinfecciones. Es más resistente a los anticuerpos monoclonales empleados habitualmente como tratamiento, pero los antivirales parecen mantener su eficacia.
“Todavía no hay datos suficientes para saber a ciencia cierta la efectividad de las vacunas actuales frente a la variante XBB.1.5, pero seguro que siguen siendo efectivas para mantener la protección, especialmente con la dosis de refuerzo bivalente”, explica el Dr. Antoni Trilla, médico epidemiólogo del Clínic.
Las vacunas permiten reducir significativamente las formas graves y muy graves de la COVID. Es especialmente importante la vacunación (dosis de refuerzo) en las personas de mayor riesgo: más de 60 años, embarazadas, pacientes con enfermedades graves de base y personal sanitario. Recibir la segunda dosis de refuerzo con una vacuna bivalente actualizada supone menos riesgo de contagio, menor riesgo de ingreso en el hospital y menor riesgo de presentar formas graves de la COVID.