La respuesta es clara: no existe una única causa en la aparición de un trastorno adictivo. Sin embargo, sí que encontramos varios factores que influyen en el desarrollo de los trastornos de este tipo. Es decir, los diferentes factores interrelacionados provocan que, cuando una persona inicia el consumo de una droga, se produzcan una serie de cambios cerebrales.
Cuando se producen estos cambios, se alteran los llamados circuitos de recompensa. Estos son los encargados de hacer saber a la persona que una acción es o no beneficiosa para ella y que, por lo tanto, vale o no la pena repetirla. Estos cambios hacen que se acabe estableciendo un proceso en bucle en el cerebro que, finalmente, desencadena la adicción.
Los factores más influyentes en el desarrollo de un trastorno adictivo son los siguientes:
- Factores genéticos. Uno de los factores fundamentales viene determinado por la genética.
- Factores ambientales. Los estímulos ambientales a los que se somete una persona a lo largo de su vida juegan un papel fundamental en el desarrollo del trastorno. Por ejemplo, cuanto antes se inicia el consumo de una droga determinada en la vida de una persona, y también cuanta más cantidad se toma, más riesgo hay de desarrollar una adicción.
- Personalidad. Determinados rasgos de personalidad, como la impulsividad o la tendencia a buscar nuevas sensaciones, incrementan el riesgo de tener un trastorno adictivo.
- Enfermedad mental. La presencia de una enfermedad mental también incrementa el riesgo de desarrollar un trastorno de este tipo.
- Factores sociales. Las circunstancias sociales también son relevantes en el desarrollo de las adicciones. La accesibilidad, la economía y la publicidad son factores a tener en cuenta, que influyen en la extensión del consumo de la droga y en la generación de más o menos adictos.
Una vez iniciado el trastorno adictivo, su evolución suele ser remitente-recurrente. Es decir, la persona no es capaz de controlar el consumo y alterna periodos de abstinencia con otros de elevado consumo. También existen factores desencadenantes de las recaídas, que son los siguientes:
- Malestar psicológico, como tristeza, angustia, nerviosismo o irritabilidad.
- Estímulos relacionados con la droga, como ver a otras personas que la están tomando.
- Craving, que se define como un deseo muy intenso y, a menudo, irrefrenable de tomar la droga.
- Abstinencia física, que aparece cuando la persona tiene dependencia fisiológica a la sustancia.
En definitiva, la adicción es un trastorno mental crónico y recidivante que no tiene una causa concreta, sino varias que se mezclan e interaccionan entre ellas influyendo en la aparición y posterior desarrollo de la enfermedad.