El hospital Clínic Barcelona incorporó la musicoterapia como herramienta de soporte en los cuidados neonatales en la UCIN hace más de 6 años, y des de hace unos meses se realiza un estudio para evaluar el impacto que tiene la práctica de la musicoterapia en los recién nacidos y en sus familias, y cómo afecta en su calidad de vida. Es un estudio elaborado gracias a una beca de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), dirigido por Óscar García-Algar, coordinador de Innovación e Investigación del Servicio de Neonatología del Clínic, y Maria Aguilera, musicoterapeuta y docente.
“El objetivo es ver si la musicoterapia tiene algún efecto beneficioso en los recién nacidos, pero también en las familias y los profesionales”, explica el Dr. García-Algar. Se mira si mejoran algunos parámetros, como los días de ingreso, la producción de leche, o el aumento de peso del bebé. El estudio “Efecto de la musicoterapia en los recién nacidos prematuros ingresados en la UCIN y sus familias” se encuentra en el análisis previo y preliminar y, de momento, analizando los datos recogidos, los resultados son positivos, por lo tanto “parece que realmente es beneficioso y mejor tanto las variables biológicas como la calidad de vida de las familias”, asegura el Dr. García-Algar.
La Musicoterapia como herramienta terapéutica en la UCIN
Las sesiones de musicoterapia se hacen dentro de la UCIN y constan de diferentes partes. Primero se interpreta música para todo el mundo, pero luego se hace una intervención individualizada con cada familia que participa, con un masaje sonoro relajante a través de la voz y diferentes instrumentos. También hay una parte más activa y participativa donde la familia canta y toca algún instrumento, adquiriendo herramientas para estimular musicalmente su bebé. Además, gracias a la musicoterapia se reduce la contaminación acústica de la UCIN, donde normalmente hay muchos ruidos por la maquinaria necesaria en la asistencia de los bebés ingresados. Las sesiones aportan diferentes beneficios a los bebés. Les disminuye el estrés, refuerza el vínculo afectivo con sus familias, provoca relajación muscular, disminuye el dolor, estabiliza la frecuencia cardiaca y aumenta el oxígeno en sangre.
Maria Aguilera, musicoterapeuta y docente, imparte estas sesiones en el hospital Clínic Barcelona desde que en 2018 tuvo sus hijas gemelas ingresadas en la UCIN. En forma de agradecimiento, y después de formarse en musicoterapia profesionalmente, empezó a ofrecer voluntariamente esta herramienta. “La acogida de la musicoterapia es fantástica. Las familias lo agradecen muchísimo porque es un momento que le da dignidad a su paso por el hospital”, asegura.
Las intervenciones musicales son positivas porque la música adecuada tiene un efecto positivo en el ser humano, y por lo tanto, en los bebés prematuros, sus familias, y en el equipo sanitario, que están viviendo una situación de alta complejidad. Maria explica que, con la musicoterapia, lo que intenta es acercarse más individualmente a cada familia y “entender qué necesidad tiene cada familia en concreto, y vincular toda la sesión a su caso particular”. “Mi experiencia personal fue la que me guió hacia este camino, porque a través de la música y la creatividad pude gestionar mejor la maternidad prematura y todo lo que comporta emocional y físicamente. A la vez, me permitió comunicarme con mis hijas, estimularlas de una forma muy respetuosa y tierna que les encantaba y generar un vínculo profundo y genuino que aún dura”, recuerda.
