Dra. Ana de Hollanda “El paciente tarda seis años en consultar por obesidad debido al estigma y al miedo a ir al médico”
La obesidad es un problema global que no para de crecer desde hace 40 años. Hoy en día, el estigma social sobre las personas con obesidad dificulta su tratamiento porque las hace sentir culpables. Además, también afecta a la calidad de la atención sanitaria, que muchas veces se centra en la pérdida de peso e ignora otros problemas de salud. Equipos transversales y multidisciplinares como el del Clínic Barcelona luchan por cambiar gradualmente esta situación.
Las Dras. Ibarzabal, de Hollanda y Moizé son expertas en el tratamiento de la obesidad desde diferentes perfiles profesionales. El grupo de trabajo de Obesidad del Servicio de Endocrinología y Nutrición es un ejemplo de transversalidad y de trabajo en equipo. Se da la atención a la obesidad, tanto si requiere tratamiento quirúrgico como si no, en estrecha colaboración con los Servicios de Cirugía Gastrointestinal y Psicología Clínica.
- Dra. Ana de Holanda: Sí, es un problema global. Ahora no hay ningún país en el mundo que tenga una prevalencia menor al 20% de obesidad. Por desgracia, afecta más a países y a personas que tengan un mayor riesgo de exclusión social, cuando hay menor nivel socioeconómico, hay más obesidad.
- Dra. Violeta Moizé: Aquí en Barcelona hay muchas diferencias entre barrios, por ejemplo, entre el barrio de Sarrià, hay una diferencia muy importante con barrio de La Mina. La prevalencia de obesidad puede ser hasta ocho veces mayor dentro de la misma ciudad, en barrios de diferentes niveles económicos.
También hay estudios que muestran la relación entre las zonas verdes y la prevalencia de sobrepeso y obesidad. Las zonas con más áreas verdes tienen índices más saludables. Estos espacios facilitan que la gente pueda tener una vida activa, hacer actividad física fácil y asequible.
- Dra. Violeta Moizé: Sí que se puede prevenir, pero no se puede evitar al 100% que suceda. La obesidad no depende sólo del ambiente ni es algo que esté del todo bajo el control de la persona. El ambiente puede ser más o menos favorable y eso permitirá prevenir mejor o peor. De hecho, comer mal, lo hacemos muchas personas y no todas desarrollamos obesidad. Eso ya te indica la relación tan fuerte que hay entre la predisposición de cada persona y que puedas tener la enfermedad.
- Dra. Ana de Hollanda: Es cierto. Desde el año 75 hasta ahora la prevalencia de obesidad se ha triplicado. Entonces, gracias a ese tipo de artículos la gente y los medios se dan cuenta de que este problema de salud es mucho más importante, anteriormente era un problema ignorado. Ahora sí que hay un poco más de conciencia, es un poco más visible.
Dra. Violeta Moizé: Este tipo de frases generan conciencia social, pero no hay solo que preocuparse y sino también ocuparse. Con sólo decirlo no es suficiente.
- Dra. Ana de Hollanda: El estigma afecta mucho más de lo que podemos imaginar. El paciente puede tardar una media de seis años en consultar por la obesidad debido al estigma. Por el miedo a ir a la consulta, a ver que le dirán. El paciente cree que es su responsabilidad y su culpa tener obesidad, eso limita más todavía. Además, el estigma está relacionado con un mayor riesgo de depresión, ansiedad y mayor riesgo de mortalidad. Eso es muy importante. La causa de ese estigma somos todos.
- Dra. Ana de Hollanda: Muchas veces los médicos, de cualquier especialidad, la primera respuesta que tenemos ante cualquier problema en un paciente con obesidad es que tiene que perder peso. Entonces, los pacientes acaban suponiendo la respuesta antes de ir a un médico y por eso evitan consultar. Muchas veces se dejan de hacer exploraciones que se tendrían que hacer. A las personas con obesidad le pasan cosas que no están relacionadas con el peso y no abordarlas puede poner en peligro su vida.
- Dra. Ainitze Ibarzabal: Es así. Traté a una paciente que recorrió tres o cuatro hospitales y que realmente tenía una hernia interna, que es potencialmente mortal. Le decían que le dolía el abdomen por haber comido mal, por el sobrepeso, pero una hernia es un problema de verdad.
- Dra.Violeta Moizé: Un ambiente favorable es un ambiente libre de estigma. Además, muchas veces desde el propIo centro de salud se utilizan frases que pueden sonar como amenazas: “Te tienes que operar de la rodilla, pero hasta que no pierdas peso, no vuelvas.” La obesidad no se trata con fuerza de voluntad.
- Ana de Hollanda: la endocrinóloga lo que hace cuando recibe al paciente por primera vez es valorar cuáles son los aspectos que influyeron en esa persona para que tenga obesidad. Estos determinantes sos múltiples y en cada persona pueden combinarse de una forma diferente.
Por otra parte el endocrinólogo investiga todas las complicaciones que puede generar la obesidad, debidas a los factores de riesgo cardiovasculares, y los trata directamente. Luego pacta el plan terapéutico junto con el paciente. Por ejemplo, en un paciente pueden ser los hábitos alimentarios el punto predominante a trabajar, entonces la estrategia de tratamiento seria junto a la dietista-nutricionista. Si, en cambio, se detectan alteraciones en la conducta alimentaria, la estrategia sería otra, se abordaría los aspectos más psicológicos. Además, recomienda el tratamiento farmacológico o quirúrgico de forma personalizada.
- Dra.Violeta Moizé: Nuestro papel siempre es la base del tratamiento, incluso en la prevención.
Intentamos empoderar al paciente para que pueda elegir lo que más le conviene para su salud, ya sea promoviendo una alimentación más saludable y o disminuyendo el sedentarismo, que es un punto muy importante.
Esto requiere de un programa estructurado y escucha activa, para facilitar y motivar ese cambio. No se trata de decir al paciente lo que tiene que hacer, sino facilitar que decida lo que más le conviene para su salud. En este punto me gustaría resaltar la importancia de dejar de dar “dietas”. La “dieta” no sirve, y la palabra en sí, ya está estigmatizada.
- Dra. Ainize Ibarzabal: Lo que yo hago es aplicar ciertas técnicas quirúrgicas que restringen la capacidad del estómago o favorecen la mala absorción de los alimentos. Esto, además, produce ciertos cambios hormonales que favorecen la pérdida de peso.
Pero el orden de los tratamientos puede variar. Es decir, en un momento concreto vamos a hacer una cirugía, pero después de la cirugía no se acaba todo. Después vuelve a entrar la nutricionista, la endocrinóloga, puede ser que en algún momento necesiten otra vez una nueva cirugía. Puede ser que necesiten a un preparador físico, un psicólogo…
Es decir, que este escalón inicial puede revertirse completamente durante todos los años de tratamiento.
- Dra. Ainize Ibarzabal: Completamente. El hecho de que estemos aquí las tres ya es algo bastante diferente. El hecho de hablemos de una enfermedad crónica ya hace que el tratamiento cambie.
El paciente va a necesitar tratamientos diferentes durante toda su vida y nuestro trabajo es identificar qué es lo que va a necesitar ese paciente. Y creo que eso es lo que más ha cambiado. No imponemos una dieta, fármacos, cirugías, psicólogos. No, el paciente tiene su vida, el paciente no es un robot y puede necesitar durante toda su vida diferentes tratamientos. Nosotros tenemos que ser capaces de ofrecerle todos esos tratamientos.