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El trasplante de hígado o trasplante hepático es el tratamiento de elección en los pacientes con enfermedades de hígado y de las vías biliares graves e irreversibles.

Este procedimiento consiste en reemplazar un hígado enfermo por uno sano de un donante fallecido o vivo, ya sea el órgano completo o una parte, a través de una operación quirúrgica. El objetivo del trasplante es intentar aumentar la supervivencia y la calidad de vida de las personas afectadas por una enfermedad de hígado y de las vías biliares avanzadas, cuando ya se han agotado todos los otros tratamientos médicos y quirúrgicos.  

El trasplante de hígado en primera persona

Profesionales y pacientes te explican cómo se convive con la enfermedad
Trasplante de Hígado | PortalCLÍNIC
Es un proceso en el que intervienen muchos profesionales y todos ellos han de trabajar con una máxima eficacia, eficiencia y teniendo siempre en cuenta que deben luchar y procurar la máxima seguridad para el paciente.
El Trasplante de Hígado en primera ...
He de decir que me pensaba que sería mucho más grave, bien mucho más duro y no, la verdad. Quizás, porque íbamos muy preparados y nos habían dicho todo como iría. La verdad es que no fue tanto como pensaba. Tuve una recuperación en el hospital muy rápida.

Tipos de Trasplante Hepático

Hígado

Trasplante ortotópico de hígado entero. Es el tipo de trasplante más frecuente. Consiste en la extirpación del hígado enfermo del paciente y la implantación del hígado entero de un donante fallecido en el mismo lugar anatómico.

Trasplante parcial de hígado

Trasplante ortotópico de hígado parcial. El trasplante de hígado parcial consiste en la extirpación del hígado enfermo y la colocación en su lugar de un fragmento del hígado del donante (lóbulo derecho o lóbulo izquierdo). Esto se realiza cuando se realiza el trasplante mediante la técnica de split o bien, es un trasplante con donante vivo. Al cabo de aproximadamente dos meses, el fragmento de hígado trasplantado se regenera y recupera su tamaño entero y sus funciones completas. 

En el caso del trasplante de donante vivo, la principal ventaja frente al trasplante de donante cadáver, es que no tiene que esperar a que aparezca un donante cadáver compatible. Sin embargo, este tipo de trasplante puede generar una serie de inconvenientes en los donantes vivos, que se deben valorar (aparición de complicaciones e incluso riesgo de muerte, que actualmente es inferior al 0.3%).

¿Qué enfermedades pueden necesitar un Trasplante Hepático?

A pesar de que el trasplante hepático constituye, teóricamente, el tratamiento de elección en todos los pacientes con enfermedades del hígado y de las vías biliares graves e irreversibles, es el hepatólogo quien determina la indicación de un trasplante. En general, las enfermedades que más habitualmente requieren un trasplante son: enfermedades colestásicas crónicas (cirrosis biliar primaria; colangitis esclerosante primaria, atresia de vías biliares (enfermedad propia de niños)); cirrosis de origen no biliar por virus de la hepatitis B y C, alcohólica, autoinmune, esteatohepatitis no alcohólica (NASH), criptogénica; tumores hepáticos (carcinoma hepatocelular); insuficiencia hepática aguda (hepatitis vírica grave, hepatitis tóxico-medicamentosa grave, insuficiencia hepática aguda de causa indeterminada); enfermedades metabólicas (hemocromatosis; enfermedad de Wilson; tirosinemia, glucogénesis) y otras enfermedades (síndrome de Budd-Chiari; enfermedad de Caroli).

Información documentada por:

Constantino Fondevila Campo
Eva López Benages
Miquel A. Navasa Anadon
Raquel García Muñoz

Publicado: 20 de febrero del 2018
Actualizado: 20 de febrero del 2018

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