¿Qué es la Gammagrafía?

La gammagrafía puede solicitarse en múltiples situaciones. Por ejemplo, cuando se quiere detectar una enfermedad inflamatoria, infecciosa o tumoral oculta, para evaluar si un cáncer ha afectado los huesos, para ver el funcionamiento del corazón o su flujo sanguíneo, en caso de que se tenga sospecha de una enfermedad coronaria, el flujo sanguíneo cerebral, la función renal, la función digestiva, para confirmar o descartar problemas de tiroides, entre otros. 

Hay dos maneras de adquirir las imágenes: 

• Adquisición estática. Consiste en obtener una sola imagen durante un periodo de tiempo determinado. La suma de imágenes estáticas alrededor del paciente se conoce como SPECT y se adquiere juntamente con la Tomografía computada (TC) obteniendo imágenes SPECT/TC. 

• Adquisición dinámica. Consiste en obtener varias imágenes en diferentes momentos durante un intervalo de tiempo determinado.  

Actualmente, existen diferentes tipos de gammagrafía que permiten el diagnóstico temprano de enfermedades de diferentes especialidades: ósea, cardiología, oncología, endocrinología, neurología, nefrología y urología, neumología, hematología, sistema digestivo, patología infecciosa, sistema vascular periférico y pediatría. 

La preparación para la gammagrafía puede variar según el tipo específico de examen y la condición médica que se está evaluando. Las directrices generales son: 

1. Informar al profesional sanitario sobre cualquier afección médica, alergia o medicamento que se tome. 

2. Llevar ropa cómoda y evitar la ropa con cremalleras, botones o botones metálicos, ya que pueden interferir con la imagen. 

3. Beber muchos líquidos antes y después del examen, ya que esto puede ayudar a eliminar el radiofármaco del sistema de manera más rápida. 

4. No es necesario estar en ayunas, excepto en algún tipo de gammagrafía como la tiroidal, vaciamiento gástrico y rastreo con 131I. 

5. Evitar la cafeína, la nicotina y el ejercicio intenso durante al menos 24 horas antes del examen, ya que pueden afectar a los resultados. 

6. Si se está embarazada, se sospecha o se está en periodo de lactancia, informar al profesional sanitario o al personal de enfermería de medicina nuclear antes del examen, ya que algunos tipos de imágenes de medicina nuclear pueden no ser recomendables durante el embarazo o la lactancia. 

7. Llegar con tiempo a la cita para realizar cualquier trámite que sea necesario.  

8. En función del tipo de prueba, puede ser necesario permanecer en el centro de imagen durante varias horas después de la inyección para permitir la absorción del radiofármaco y realizar la imagen en el momento óptimo. 

9. Se tiene que evitar el contacto estrecho con embarazadas o niños durante el tiempo que indique el personal de enfermería de medicina nuclear.  

En la gammagrafía se administra una pequeña cantidad de un radiofármaco, un compuesto radioactivo que emite rayos gamma que son detectados por la gammacámara. La gammacámara se coloca sobre el área de estudio y crea imágenes que muestran la distribución del radiofármaco dentro del cuerpo. A continuación, el especialista de medicina nuclear analiza las imágenes para diagnosticar o evaluar la condición médica. 

Los pasos específicos para la realización de una gammagrafía pueden variar según el tipo de prueba que se está realizando, pero, en general, son los siguientes: 

• Se administra al paciente una pequeña cantidad del radiofármaco (vía oral o intravenosa en función del tipo de prueba). 

• El paciente espera un tiempo determinado para que el radiofármaco se distribuya por el cuerpo. 

• Pasado el tiempo de espera, el paciente se coloca tumbado e inmóvil sobre una litera y la gammacámara se coloca sobre la zona de interés que empieza a detectar los rayos gamma emitidos por el radiofármaco. 

• En algunos tipos de gammagrafía se puede pedir que el paciente cambie de posición durante el proceso para obtener imágenes desde diferentes ángulos. 

• Una vez finalizada la prueba, se puede pedir al paciente que espere en el servicio mientras las imágenes son revisadas por el especialista de medicina nuclear para comprobar que estas son valorables. 

• Después del examen, el radiofármaco se desintegra de forma natural y se elimina del organismo por orina y/o heces. Es aconsejable que el paciente beba líquidos para ayudar a eliminar el radiofármaco del sistema de manera más rápida. 

La gammagrafía la realizan profesionales de la salud calificados especializados en medicina nuclear. El equipo incluye:  

• Especialista en medicina nuclear. Se encarga de interpretar los resultados de la exploración y determinar el mejor curso de tratamiento a partir de las imágenes obtenidas. 

• Radiofarmacéutico. Responsable de la gestión del radiofármaco. 

• Personal de enfermería de medicina nuclear. Realiza la valoración previa del paciente y administra el radiofármaco en función de la prueba indicada por el especialista. 

• Técnico superior en imagen para el diagnóstico. Responsable de usar la gammacámara y velar por la seguridad del paciente durante el examen.  

• Ingeniero Biomédico. Se encarga de crear, supervisar las características de la adquisición, reconstrucción y procesamiento de imágenes. 

• Radiofísico. Especialista que asegura que la gammacámara funciona de manera correcta y que la dosis de radiación que se administra al paciente es segura y adecuada. 

Todos los miembros del equipo son profesionales formados que trabajan de forma conjunta para garantizar que el examen se realiza con seguridad y precisión, y que el paciente recibe la mejor atención posible. 

La duración de la prueba de gammagrafía puede variar en función del tipo de examen que se realice. Algunos procedimientos pueden durar solo unos minutos, mientras que otros pueden requerir varias horas o realizarse a lo largo de varios días. 

Por ejemplo, una gammagrafía ósea suele durar entre 2 y 3 horas hasta completarse, mientras que una gammagrafía tiroidal suele durar 60 minutos. La gammagrafía de estrés cardiaco puede durar varias horas, ya que el paciente previamente tiene que hacer ejercicio o recibir medicamentos para aumentar el flujo sanguíneo en el corazón antes de obtener la imagen. 

Es importante llegar con tiempo a la cita y seguir las instrucciones de preparación proporcionadas por el equipo sanitario para asegurar que el examen se realiza de manera eficaz y precisa. 

La mayoría de los pacientes no experimentan ninguna molestia durante la realización de una gammagrafía. Asimismo, algunos pacientes pueden experimentar algunas sensaciones como: 

• Malestar por la inyección. Si el radiofármaco se administra por inyección intravenosa, el paciente puede sentir una pequeña molestia o dolor en el lugar de la inyección. 

• Calidez o frescor. Se puede experimentar una sensación de calor o frescor a medida que se absorbe el radiofármaco. 

• Náuseas. Se pueden tener náuseas leves o un gusto metálico en la boca como efecto secundario del radiofármaco. 

• Ganas de orinar. Tener la necesidad de orinar con más frecuencia a medida que se elimina el radiofármaco del cuerpo. 

• Claustrofobia. En algunos casos, los pacientes pueden sentir claustrofobia o sentirse ansiosos durante la obtención de la imagen, ya que hay que permanecer quieto en un espacio reducido. 

Es importante informar a los miembros del equipo sanitario si se experimenta alguna molestia o efecto secundario durante la exploración. 

La gammagrafía se considera una técnica de imagen segura y no invasiva. No obstante, existen posibles complicaciones asociadas con el uso de radiofármacos: 

• Reacción alérgica. En casos muy poco frecuentes, los pacientes pueden experimentar una reacción alérgica a la inyección de radiofármaco, que puede causar síntomas como urticaria o picor. 

• Exposición a la radiación. La dosis administrada en un procedimiento de gammagrafía es muy baja y el riesgo de efectos secundarios a largo plazo es, en general, bajo y no impide hacer vida normal. 

• Embarazo y lactancia. Las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia tienen que informar al profesional sanitario antes de someterse a una gammagrafía para disminuir tanto como sea posible la radiación que reciba el feto o el bebé. 

Es importante consultar cualquier riesgo o preocupación con el especialista antes de someterse a una gammagrafía.