Causas del Bocio

Deficiencia de yodo. A nivel mundial, la causa más común de la formación de bocio es la falta mantenida de yodo en la alimentación, el llamado bocio endémico.  

Las hormonas tiroideas presentan un alto contenido en yodo, por lo que si la glándula tiroidea no tiene suficiente yodo no puede producir la hormona tiroidea. Así, secreta una cantidad insuficiente de hormonas que provoca la aparición de hipotiroidismo. 

Cuando la glándula hipofisaria detecta el nivel bajo de hormona tiroidea, envía una hormona-señal a la glándula tiroides para estimularla, la tirotropina (hormona estimulante de tiroides, TSH). Esta estimula el tiroides para producir la hormona tiroidea en la cantidad necesaria, por lo que aumenta de tamaño y se forma el bocio.  

En los países desarrollados, como España y, en general, los países de la Unión Europea y Estados Unidos, la deficiencia de yodo ha dejado de ser un problema común gracias a las medidas epidemiológicas, sociosanitarias y a la educación de la población orientadas a consumir sal yodada. Sin embargo, sigue habiendo zonas y comunidades donde el déficit de yodo sigue siendo un problema.

El yodo se encuentra en productos del mar, así como en plantas que crecen en suelos ricos en yodo. La sal para el consumo diario es frecuentemente suplementada con yodo y se conoce como sal yodada. 

Enfermedades autoinmunes crónicas del tiroides (tiroiditis de Hashimoto o la enfermedad de Graves).

• Tiroiditis autoinmune crónica, de Hashimoto, es una causa común de formación de bocio. Es una enfermedad autoinmune en la que el propio sistema inmune del paciente ataca a la glándula tiroides. Cuando la destrucción de la glándula está avanzada, el tiroides no puede asegurar el aporte suficiente de hormonas. Al igual que en el déficit de yodo, la hipófisis detecta el hipotiroidismo y sintetiza más TSH para estimular la tiroides y la producción de hormonas tiroideas. Si la evolución de la enfermedad es lenta y permite el crecimiento del tiroides, el proceso llevará a la formación de un bocio. 
• Enfermedad de Graves. En este caso, el sistema inmune produce un anticuerpo estimulante de la tiroides, llamado anticuerpo antireceptor de TSH (TRAB) o inmunoglobulina estimuladora (TSI). Al igual que la TSH, la TSI/TRAB estimula la glándula tiroides para aumentar la producción de hormonas tiroides lo que lleva al desarrollo de un bocio. La glándula pituitaria detecta la cantidad excesiva de hormona en la sangre y bloquea la secreción de TSH para frenar el tiroides, pero la glándula tiroides sigue respondiendo al TSI, creciendo y produciendo de forma excesiva hormonas. Por lo tanto, la enfermedad de Graves produce un bocio difuso e hipertiroidismo.