Se trata de una pizarra, ubicada en la misma sala, que permite registrar en tiempo real información clave relacionada con el proceso de alarma de trasplante (la hora de llegada del receptor, el momento previsto de bajada a quirófano o la hora de las analíticas, entre otros).
Esta herramienta forma parte de una mejora iniciada en junio de 2023, cuando se habilitó un espacio específico para la preparación del paciente receptor en situaciones de alarma. En estos casos, los profesionales de enfermería deben reaccionar con la máxima rapidez, interrumpiendo su actividad habitual para garantizar que el paciente llegue a quirófano en condiciones óptimas.
A pesar de la mejora logística, era necesaria una herramienta que asegurara una comunicación rápida y clara entre todos los agentes implicados. La nueva pizarra permite centralizar la información y hacer visible el estado del proceso en todo momento. Esto ha permitido reducir incidencias y ganar tiempo en un circuito tan crítico.
Los resultados son claros: se ha pasado de 6 incidencias reportadas al Núcleo de Seguridad en 2021 a 0 en 2024, y el tiempo medio desde la llegada del paciente hasta quirófano se ha reducido de 16,33 horas a 11,67. Además, el equipo de la sala ha valorado muy positivamente esta mejora, con una puntuación media de 4,59 sobre 5.
Una iniciativa que demuestra cómo una herramienta simple puede tener un impacto muy significativo en la calidad, la seguridad y la eficiencia asistencial.