El programa de diálisis de noche nace fruto de las necesidades de los pacientes, puesto que muchos de ellos tienen una vida laboral activa y este turno les permite compaginar la vida laboral con su tratamiento. Además, éste es de mayor duración y de mayor intensidad, por lo que se han obtenido unos mejores resultados.
La diálisis es el proceso artificial mediante el cual se extraen los productos de desecho y el exceso de agua del organismo. Este proceso es necesario cuando los riñones no funcionan correctamente. En este programa de diálisis de noche se realiza el procedimiento de hemodiafiltración. La hemodiafiltración es un procedimiento en el que se combina difusión y convección. Además de la difusión habitual de la hemodiálisis, se extraen grandes cantidades de ultrafiltrado del plasma de la sangre del paciente (agua, electrolitos y toxinas urémicas) únicamente por transporte convectivo, lo que da lugar a una elevada depuración. Durante la hemodiafiltración, la sangre del paciente es pasada a través de un conjunto de líneas hacia la máquina, donde llega ) a una membrana semipermeable (el filtro) donde son eliminados los residuos y el agua. Para compensar esta pérdida de volumen (40-50 litros por sesión) es necesario el líquido de sustitución, libre de toxinas, y finalmente la sangre es devuelta al paciente. El Clínic es el único hospital del Estado que realiza este tipo de diálisis, más eficiente ya días alternos.
Las sesiones de diálisis de noche normalmente son en días alternos (4 o 3 días dependiendo de la semana). Los pacientes llegan a las 22 horas y se marchan del hospital entre 7 y 8 de la mañana. Mientras el paciente duerme realiza su tratamiento de hemodiafiltración (técnica que actualmente es la que más depura), durante más rato de lo habitual (8 horas, el doble de la duración habitual) y con mayor frecuencia. Una semana vienen lunes, miércoles, viernes y domingo y la otra semana vienen martes, jueves y sábado. Con este tipo de sesiones más concentradas es más fisiológica y el corazón sufre menos. En todos los tratamientos de diálisis, y éste no es una excepción, el rol del personal de enfermería es clave.
Los pacientes que reciben este tratamiento suelen tener una vida muy activa y son profesionales de ámbitos tan diversos como: profesores de universidad y de escuelas, profesionales con negocios propios, abogados, profesionales relacionados con la construcción… La estancia media de estos pacientes en el programa es de 35 meses.
Una de las complicaciones de la diálisis convencional es lo que se llama 'síndrome de fatiga post diálisis'. Los pacientes están cansados, fatigados (puede durar entre 2 y 6 horas). La hemodiafiltración de noche y más frecuente permite reducir los síntomas post-tratamiento. Antes, los pacientes que tenían que hacer diálisis tenían náuseas, vómitos, malestar... Ahora se pueden personalizar mucho más los tratamientos.
Si nos centramos en los resultados del programa, desde septiembre de 2007, 100 pacientes ya han podido incluirse en el programa de diálisis de noche del Clínic. De éstos, 68 pacientes han recibido un trasplante renal (61 de donante cadáver y 7 de donante vivo).
Al mismo tiempo, se han cumplido las perspectivas de muy buena tolerancia a la técnica y de mayor eficacia. Además, los pacientes manifiestan encontrarse mejor y al mismo tiempo, se han reducido el número de fármacos a tomar. Por ejemplo, no se administran captores de fósforo, se han reducido mucho los fármacos antihipertensivos, no necesitan ningún fármaco para reducir el exceso de potasio, y se ha reducido a la mitad los medicamentos para controlar la anemia como fármacos estimulantes de la eritropoyesis (eritropoyetina).
Los pacientes que deben recurrir al tratamiento de diálisis tienen Insuficiencia Renal Crónica; que se define como el deterioro progresivo e irreversible de la función renal. Es decir, los riñones pierden su capacidad para eliminar toxinas y controlar el volumen de agua del cuerpo. Pueden pasar años desde el inicio del diagnóstico inicial hasta llegar a la fase crónica. En el momento en que los riñones pierden su función, también dejan de producir una serie de hormonas que ayudan a regular la tensión arterial y estimular la producción de glóbulos rojos (eritropoyetina) o la absorción de calcio de los alimentos para mantener los huesos saludables (vitamina D).
El Dr. Francesc Maduell, Jefe de Sección de diálisis del servicio de Nefrología y Trasplante renal del Hospital Clínic Barcelona resalta que “las cifras de este programa de diálisis de noche demuestran que es un tratamiento eficaz y efectivo y que al mismo tiempo facilita una rehabilitación laboral y familiar y por tanto mejora la calidad de vida de los pacientes”.