La imagen de resonancia magnética funcional en estado de reposo (rs-fMRI) es una técnica no invasiva que permite ver la activación del cerebro e identificar redes de conectividad funcional, por ejemplo, la red motora, la red visual... sin necesidad de que el sujeto haga ninguna tarea específica. Por ello es una técnica muy usada en la investigación en humanos en disciplinas como la psiquiatría o las enfermedades neurodegenerativas.
Su aplicación en modelos animales tiene un gran potencial traslacional, ya que permite obtener redes funcionales comparables a las descritas en humanos. Sin embargo, hasta ahora no había un protocolo de consenso. "Se habían publicado varios trabajos de resting-state fMRI en ratas, pero cada grupo de investigación implementaba su propio protocolo de adquisición basándose en lo que ya existía en literatura e incorporando sus propias modificaciones, lo que a veces hacía difícil comparar resultados", explica Emma Muñoz-Moreno, responsable de la plataforma de Imagen de resonancia magnética.
El objetivo del trabajo que publica Nature Neuroscience ha sido definir un protocolo común para llevar a cabo la adquisición de rs-fMRI que permita una identificación óptima de las redes funcionales. Para eso se empezó con una fase denominada MultiRat en la que 46 centros aportaron datos de proyectos anteriores para identificar los parámetros que optimizan la identificación de estas redes. El IDIBAPS contribuyó con adquisiciones realizadas en el marco de dos proyectos liderados por Guadalupe Soria, que estaban enfocados a los cambios en la conectividad en modelo de Alzheimer.
A partir de aquí se elaboró el protocolo, que recoge los parámetros de adquisición de la resonancia magnética y las condiciones de sedación de los animales. "Además, como los datos tal y como salen del escáner necesitan ser procesado mediante distintos algoritmos para asegurar su calidad y obtener de ellos la información de interés, se ha puesto disponible el pipeline de preprocesado". añade Muñoz-Moreno.
Posteriormente se llevó a cabo una segunda fase, denominada StandardRat en la que participaron 20 centros para evaluar el protocolo de consenso. En este caso, el IDIBAPS participó escaneando 10 animales (5 machos y 5 hembras) con dicho protocolo y compartiendo las imágenes obtenidas.