Otra ventaja de esta técnica es que el profesional de cirugía no utiliza el microsopio y puede realizar la operación con la cabeza levantada mirando una pantalla, como ya ocurre con las cirugías laparoscópicas. El Clínic visita a unos 690 pacientes con problemas de infertilidad masculina cada año. El equipo que lidera estas cirugías está formado por el Dr. Josep Torremade, el Dr. Joan Manuel Corral y el Dr. Luis Peri.
Esta técnica quirúrgica mejora las actuales técnicas quirúrgicas en el campo de la andrología reproductiva. Una de las principales indicaciones es en pacientes con varicocele. El varicocele es el agrandamiento de las venas del testículo y son una causa frecuente de la baja producción y baja calidad del esperma, lo que puede provocar infertilidad. También se puede utilizar para recuperar espermatozoides del testículo en casos de azoospermia (ausencia de espermatozoides en el semen). La azoospermia puede representar entre el 2-15% de los casos de infertilidad masculina.
Por el Dr. Juan Manuel Corral, urólogo del Clínic “la infertilidad masculina es un problema predominante de salud y también un problema emocional. Con esta técnica vamos a buscar los espermatozoides en la fuente de producción que está en el tejido testicular”. Por su parte, el Dr. Josep Torremade, también del Servicio de Urología del Hospital Clínic de Barcelona defiende "este tipo de intervenciones aumentan los resultados de recuperación comparado con los de la biopsia convencional".
El Dr. Antonio Alcaraz, jefe de servicio de urología del Hospital sostiene que la “práctica de esta técnica demuestra, una vez más, la apuesta por la innovación en el Clínic con el objetivo único de mejorar la calidad de vida de los pacientes y mejorar la eficiencia en todos los procesos”.
Infertilidad masculina
Se entiende por infertilidad masculina cuando un hombre tiene dificultades para embarazar a una mujer después de haberlo intentado al menos por un año. Las causas pueden ser diversas, pero sobre todo pueden ser: problemas físicos de los testículos, bloqueos de los tubos que transportan el semen, problemas hormonales, enfermedades genéticas e incluso factores ambientales o estilo de vida. Hasta un 15% de las parejas no logran tener hijos después de un año intentándolo. En el 40% de los casos la causa de esta infertilidad está asociada a un problema exclusivo del hombre, mientras que en el 20% existe un factor asociado tanto al hombre como a la mujer. De esta forma, la infertilidad de causa masculina está implicada en al menos el 50% de los casos de infertilidad en la pareja. Por tanto, la infertilidad afecta tanto a hombres como a mujeres.