La Dra. Elisenda Gómez-Angelats, internista del Área de Urgencias del hospital Clínic Barcelona ha alertado de que las elevadas temperaturas del verano y un tiempo excesivo de permanencia en el sol pueden desencadenar una insolación y/o golpe de calor. El pasado año el hospital Clínic Barcelona atendió 12 casos de golpes de calor (como primer diagnóstico).
La Dra. Gómez-Angelats ha alertado de que hay que estar alerta a los primeros síntomas de agotamiento por calor como son: sed intensa, sudoración abundante, dolor de cabeza o, incluso, náuseas. Ante estos síntomas lo importante es refrescarse con un ventilador, aire acondicionado o con un baño de agua fría e hidratarse. Cuando una persona sufre un golpe de calor, la temperatura del cuerpo sube y puede alcanzar los 40 grados y al mismo tiempo puede suponer un peligro para la salud y agravar una enfermedad crónica.
Un golpe de calor puede tener consecuencias más graves, por lo que debe buscarse asistencia médica con urgencia. La Dra. Gómez Angelats, del Área de Urgencias del hospital Clínic Barcelona ha explicado que es muy importante evitar las horas de máxima exposición solar, entre las 12 y las 16 horas y ha recomendado realizar ejercicio a primera hora de la mañana o última hora de la tarde (caminar o correr, por ejemplo) puesto que las temperaturas son más suaves y es más fácil encontrar zonas de sombra. Al mismo tiempo, y sobre todo, con la gente mayor es importante una hidratación regular.
Para evitar los golpes de calor es importante, también, utilizar ropa adecuada para proteger la piel expuesta (ropa ancha y ligera, de colores claros) y cubrir la cabeza con un sombrero, utilizar gafas de sol con protección de rayos UVA y UVB. Así como aplicar protector solar de forma regular y con la graduación óptima.
En el Área de Urgencias del hospital Clínic de Barcelona se atienden casos de pacientes cuyo diagnóstico principal es un golpe de calor, pero sobre todo, pacientes de edad avanzada, mayores de 70 años con alguna enfermedad crónica que se ven "descompensados" por culpa del calor y las altas temperaturas. La mayoría de las personas que se atienden en Urgencias se dan de alta al cabo de unas horas, pero algunos incluso pueden quedarse ingresados 24 o 48 horas hasta su estabilización.