Envejecimiento cerebral saludable

El objetivo más importante en la investigación de la enfermedad de Parkinson es encontrar un tratamiento que cure o ayude a frenar su progresión. Actualmente se diagnostica cuando ya hay un daño irreversible en el cerebro. La degeneración y pérdida de neuronas cerebrales se inicia muchos años antes de que la enfermedad, con el temblor y lentitud de movimientos, se haga patente. No conocemos bien los factores de riesgo (genéticos, ambientales, de estilo de vida) que hacen que se desarrolle, pero sí que sabemos que las personas con pérdida de olfato o con un familiar próximo diagnosticado de Parkinson tienen más posibilidades de sufrirla. Identificar cuáles son estos factores de riesgo permitirá diagnosticarla antes de que se presenten los daños cerebrales irreversibles. Si bien la mayoría de las personas nunca contraerán la enfermedad de Parkinson, la participación a HeBa nos puede ayudar a descubrir quién lo contrae, quien no lo contrae y por qué.

El estudio HeBa tiene como objetivo recoger información de salud de personas de la población general sin enfermedad de Parkinson, con el objetivo final de identificar aquellos sujetos con alto riesgo de desarrollarla en un futuro.