El coronavirus SARS-CoV-2 es un nuevo tipo de coronavirus que se detectó por primera vez en diciembre de 2019 en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, en China. En ocho de cada 10 personas la enfermedad, la COVID-19, provoca síntomas leves, pero puede llegar a causar una enfermedad respiratoria severa como, por ejemplo, una neumonía, e incluso la muerte. La edad avanzada y la presencia de enfermedades crónicas aumentan el riesgo de necesitar ingreso en UCI y de fallecer.
No obstante, también hay pacientes más jóvenes sin patologías previas que desarrollan formas muy graves de la enfermedad por motivos actualmente desconocidos. “El objetivo de nuestro estudio es averiguar por qué algunos pacientes infectados con coronavirus (SARS-CoV-2) apenas presentan afectación clínica mientras que otros desarrollan formas muy graves de la enfermedad COVID-19”, señala Anna Planas. “Pensamos que la respuesta podría estar en nuestros genes”, añade.
El estudio, denominado INMUNGEN-CoV-2, propone que las variaciones genéticas que existen en la población normal pueden determinar una capacidad diferente de las personas para responder a agresiones causadas por la infección. La complicación más grave se produce por una respuesta exacerbada del sistema inmune innato, que es nuestra primera línea de defensa frente a las infecciones. Esta respuesta exagerada de señales inmunes es capaz de causar lesión el sistema respiratorio y otros órganos.
Por este motivo, el proyecto se centrará en el estudio de las variaciones genéticas en aquellos genes asociados a la inmunidad innata. El estudio del ADN se realizará comparando personas que hayan tenido la COVID-19 grave frente a las que hayan desarrollado formas leves de la enfermedad. “Esperamos que los resultados ayuden a identificar aquellas personas con riesgo de enfermar gravemente, ya que son las que van a necesitar mayor protección, y permitan encontrar dianas moleculares para posibles tratamientos”, explica Anna Planas.
Este proyecto está financiado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y es un esfuerzo colaborativo de diversos equipos de investigación multidisciplinares. Se obtendrán muestras de pacientes del Hospital Clínic de Barcelona gracias al soporte y colaboración de diferentes investigadores y servicios (Dr. Alex Soriano, Dr. Manel Juan, Dr. Francisco Soriano, Dra. Anna Mensa, Dr. Josep Mensa) del Clínic y del IDIBAPS. También participa en el proyecto el Dr. Israel Fernández-Cadenas del Hospital de Sant Pau de Barcelona, junto con diversos investigadores de diferentes centros e institutos del CSIC.
Esta iniciativa se sumará a un proyecto internacional liderado por la Universidad Rockefeller denominado Covid Human Genetic Effort que permitirá comparar grandes grupos de pacientes y contrastar resultados.