La espirometría forzada es una prueba que permite medir el volumen pulmonar y la rapidez de vaciado del aire del pulmón. Para ello hay que soplar con la máxima fuerza y rapidez todo el aire que sea posible desde una posición de inspiración màxima. La espirometría forzada es una de las herramientas diagnósticas que se utilizan con más frecuencia para pacientes con enfermedades respiratorias crónicas (como asma y EPOC).
Hasta ahora, la realización y/o interpretación de la prueba se hacía en la mayoría de centros de atención primaria, pero el control de calidad se tenía que hacer manualmente y los resultados de la prueba no se incorporaban directamente a la historia clínica del paciente. Estas circunstancias dibujaban un mapa muy heterogéneo en cuanto a la utilidad de la espirometría y en muchos casos generaban derivaciones del paciente a los hospitales. Con el nuevo programa, aumentará la capacidad de resolución de los profesionales de atención primaria y se contribuirá a optimizar la colaboración entre estos profesionales y los especialistas de respiratorio.
Innovación ‘Made in Catalonia’ para exportar a otros sistemes sanitarios
El nuevo programa de espirometrías cuenta con un software y un documento estandarizado que mejoran de forma muy significativa la calidad y la interpretación de la prueba. El nuevo sistema, además, facilita la evaluación de la evolución temporal de los resultados de un determinado paciente independientemente del lugar donde se haya hecho la prueba.
De esta manera, los profesionales de atención primaria mejorarán de forma notable la capacidad de resolución de problemas de estos pacientes ahorrando visitas al hospital. En caso de duda en la interpretación de los resultados, los especialistas hospitalarios podrán valorar el informe del paciente desde su carpeta electrónica de salud, sin necesidad de visita presencial. El especialista podrá ver de un vistazo todo el historial de espirometrías realizadas por el paciente y utilizar esta información para tomar decisiones.
Los diferentes aspectos del nuevo programa han sido evaluados por varios estudios publicados en revistas científicas. El potencial de transferencia de la iniciativa se ha analizado durante 6 meses en el CAP de Numancia del Institut Català de la Salut, en Barcelona. En enero de 2018 se inició el periodo de despliegue en toda Cataluña con la evaluación de su aceptación por parte de los profesionales y el impacto en el sistema de salud.
"Después de presentarlo en Londres en el marco del congreso de la Sociedad Europea de Respiratorio (ERS), el nuevo sistema ha generado gran expectación entre las sociedades científicas internacionales, con notables expectativas de despliegue en diferentes sistemas sanitarios en todo el mundo", destaca Felip Burgos, enfermero doctor en Medicina del Hospital Clínico-IDIBAPS. El nuevo método abre la puerta a la elaboración de modelos predictivos para la atención más personalizada de los pacientes respiratorios crónicos.