No todas las válvulas mitrales afectadas son óptimas para insertar este clip. Según el Dr. Manel Sabaté, Jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Clínic de Barcelona, “existen unos estrictos criterios anatómicos para su colocación que permitan enganchar bien el clip en los velos de la válvula. Además, se trata de un procedimiento complejo que requiere de hasta 98 pasos para colocar el clip”. La principal ventaja de este sistema es que no se necesita un quirófano para reparar la válvula, “se realiza en la sala de hemodinámica con anestesia, en lugar de un quirófano con cirugía extracorpórea. La recuperación y despertar post-anestésico es en la misma sala de hemodinámica. La intervención dura aproximadamente de dos a tres horas”, añade el Dr. Sabaté.
¿Cómo se lleva a cabo esta técnica?
Un dispositivo en forma de pinza se inserta por la vena femoral hasta llegar al corazón. Guiada mediante ecocardiografía esofágica, esa pinza atraviesa las cavidades cardiacas y se engancha en los velos de la válvula mitral. Una vez acoplado, se produce un “efecto pinza” que deja dos huecos de menor calibre, con lo que se evita que la sangre se escape hacia afuera en cada contracción cardíaca al cerrar mejor la válvula mitral.
Sin apenas molestias ni complicaciones, el clip mejora la denominada “clase funcional” del corazón, grado de afectación de la capacidad física de una persona inducida por una enfermedad cardíaca i por la cual se ahogan los enfermos con valvulopatía mitral, que se mide del 1 al 4: grado 4 (ahogo en reposo), grado 3 (ahogo con menos esfuerzo), grado 2 (ahogo con más esfuerzo) y grado 1 (ahogo con mucho esfuerzo). Con esta nueva técnica, el paciente baja de un nivel de grado 3-4 a uno de grado 2-1, por lo que mejora considerablemente su calidad de vida. Igualmente, además de mejorar los síntomas, se consigue un ahorro considerable de cirugías reincidentes.
Con este sistema se evita la cirugía a corazón abierto y el paciente está en casa a los dos días de ser intervenido. “Este método mínimamente invasivo permite reparar la afección valvular a los pacientes más graves y que presentan un elevado riesgo si se plantea reparar la insuficiencia valvular mediante cirugía”, señala el Dr. Sabaté. En el Clínic de Barcelona se han intervenido tres personas con este método, y se estima que puedan tratarse unas 15 personas al año.
Otro beneficio es la reducción del número de ingresos por insuficiencia cardíaca. “Los pacientes con insuficiencia mitral funcional importante suelen reingresar a menudo”, aclara el Dr. Sabaté. “Con esta técnica no tendrían que hacerlo por lo que disminuiría la carga económica y asistencial por insuficiencia cardíaca en los hospitales. Aún así, los criterios clínicos para acceder a ella son todavía muy estrictos”.
Este nuevo dispositivo llamado Mitraclip y fabricado por la empresa Abbott, se introdujo en Europa en el año 2010. Desde entonces se han realizado unos 1000 casos. En España, los primeros centros en utilizarlo, 3 meses atràs, fueron hospitales de Andalucía, Madrid y Castilla León, mientras que en Cataluña ha sido el Hospital Clínic, centro de referencia nacional en cirugía de reparación mitral, el primero en implantar este clip, iniciado su andadura en el tratamiento mínimamente invasivo por medio de cateterismo cardiaco (sin cirugía).