El estudio se llevó a cabo entre septiembre de 2004 y febrero de 2005, transcurridos unos 2 años después de que las personas que participaron tuvieran el último contacto con el fuel. En el estudio participaron 678 marineros (501 expuestos y 177 no expuestos). Consistió en la administración de un cuestionario clínico, la valoración de la función pulmonar, el estudio de marcadores de inflamación respiratoria y el análisis de alteraciones cromosómicas en células sanguíneas.
El estudio demuestra que comparado con las personas no expuestas, las que participaron en la limpieza del fuel referían más síntomas respiratorios. Asimismo, entre los participantes que no eran fumadores, los que estuvieron expuestos al fuel presentaron cambios en reactivos obtenidos en el aire exhalado sugestivos de inflamación de la vía aérea, así como una mayor proporción de alteraciones cromosómicas en las células de la sangre. Algunos de estos cambios fueron más destacados en las personas que tuvieron un mayor grado de exposición al fuel. El IDIBAPS – Hospital Clínic jugó un papel muy activo en esta parte de la investigación.
En conjunto, los resultados indican que la participación en las tareas de limpieza de vertidos de petróleo puede tener efectos indeseables sobre la salud. No se ha encontrado evidencia de ninguna enfermedad actual; sólo de alteraciones biológicas que podrían predisponer a desarrollar enfermedad. Para verificar si los cambios descritos persisten o se desvanecen con el tiempo se ha llevado a cabo un segundo estudio en la misma cohorte de marineros, una vez transcurridos 5 años desde el último contacto con el fuel (estudio SEPAR-Prestige II).
Estudio SEPAR-Prestige
El vertido de 67.000 toneladas de fuel por el buque Prestige se produjo en noviembre de 2002. En enero de 2003 la SEPAR impulsó la realización del estudio, y encargó la dirección del mismo a los Dres. Joan Albert Barberà, Francisco Pozo-Rodríguez y Héctor Verea, de los Servicios de Neumología de los hospitales Clínic de Barcelona, Doce de Octubre de Madrid y Juan Canalejo de A Coruña. Se configuró un equipo de investigación, compuesto por G. Rodríguez-Trigo (Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña, actualmente en el Hospital Clínico San Carlos, Madrid); J.P. Zock, J.M. Antó y L. Bouso (Centre de Recerca en Epidemiología Ambiental, Barcelona); F.P. Gómez (Hospital Clínic-IDIBAPS, Barcelona); y C. Fuster, G. Monyarch y M.D. Coll (Universidad Autónoma de Barcelona).
El estudio “SEPAR-Prestige” se planteó en dos fases, I y II, que se han llevado a cabo 2 y 5 años, respectivamente, después de la exposición. El proyecto ha sido financiado por el Fondo de Investigación Sanitaria (Instituto de Salud Carlos III, proyectos PI03/1685 y PI05/0548) y cofinanciado por la propia SEPAR, el Centro de Investigación en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), el Centro de Investigación en Red de Salud Pública (CIBERESP) y la Consejería de Sanidad del Gobierno de Galicia.
Estudio SEPAR-Prestige I. La primera parte del estudio consistió en la administración de un cuestionario a 6.780 marineros. Los resultados informan de que la participación en la limpieza del fuel se asocia con un aumento del riesgo de padecer síntomas respiratorios -tos y expectoración crónicas, pitos en el pecho y dificultad respiratoria- dos años después de la exposición. El método y los resultados se describen en detalle en un artículo publicado en septiembre de 2007 en la revista American Journal Respiratory and Critical Care Medicine. Los resultados de la segunda parte del estudio son los que se han publicado ahora en la revista Annals of Internal Medicine.
Estudio SEPAR-Prestige II. El trabajo de campo finalizó en Febrero de 2009, y el análisis de muestras de sangre y condensado de gas exhalado está prácticamente completado. Actualmente los investigadores están enfocados en el análisis e interpretación de los resultados, que se publicarán a su debido tiempo.