La pandemia de la COVID-19 ha supuesto un fuerte impacto en todos los sistemas sanitarios del mundo. Algunas poblaciones de riesgo, como son los pacientes con cáncer, se encontraban en la difícil tesitura de evaluar si los beneficios obtenidos por los tratamientos antineoplásicos compensaban el riesgo de una mayor probabilidad de contagio del virus o de sufrir una infección más grave. Ahora, un estudio multicéntrico con participación catalana pretende revelar algunas de las incertidumbres sobre esta población y su relación con la COVID-19.
En el estudio, que acaba de ser publicado en la revista Cancer Discovery y que tiene como primer autor y líder el Dr. David J. Pinatar, del Departamento de Cirugía y Cáncer del Imperial College London (Reino Unido), se ha evaluado el impacto de la COVID-19 en un grupo de 890 pacientes de toda Europa, hoy en día, la cohorte más grande que existe de pacientes oncológicos con COVID-19 europeos. Para ello se ha contado con la colaboración de centros de Cataluña, Italia y Reino Unido. En este estudio han participado el Hospital Clínic-IDIBAPS, los centros del Instituto Catalán de Oncología (ICO) en Hospitalet, Badalona y Girona, y el Hospital Vall d’Hebron.
"La conclusión más importante que hemos podido extraer del estudio es que la administración de tratamientos antitumorales no parece aumentar el riesgo de sufrir un cuadro grave de COVID-19. Es muy importante porque hasta ahora, tanto entre profesionales como entre pacientes, la decisión de continuar con estos tratamientos generaba un temor importante. Ahora, gracias a estos datos parece quedar claro que no existe relación", expone el Dr. Juan Aguilar, internista especialista en infectología del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Vall d'Hebron y que ha participado en el estudio junto con el Dr. Josep Tabernero, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Vall d'Hebron y director del Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO), y la Dra. Isabel Ruiz, del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario Vall d'Hebron. De este modo, ni la quimioterapia, ni las terapias dirigidas ni la inmunoterapia han supuesto un empeoramiento en el riesgo de sufrir un cuadro grave por COVID-19 o de morir por la infección.
"Durante el inicio de la pandemia decidimos mantener la actividad ambulatoria y la percepción fue que no teníamos más complicaciones de las habituales. Ahora, gracias a este estudio con casi 900 pacientes y numerosos centros europeos, parece claro que no existe relación y que se debe seguir proporcionando los mejores tratamientos a los pacientes oncológicos", expone la Dra. Claudia Andrea Cruz, médico de familia del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínic y que ha participado en el estudio junto con el Dr. Aleix Prat, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clinic y jefe del Grupo de Genómica Traslacional y Terapias Dirigidas en Tumores Sólidos del IDIBAPS, el Dr. Javier Marco-Hernández, médico internista del Servicio de Medicina Interna del Clínic, la Dra. Elia Seguí, residente del Servicio de Oncología Médica del Clínic, y la Dra. Roxana Reyes, oncóloga médica del Servicio de Oncología Médica del Clínic.
Por parte del Instituto Catalán de Oncología, los principales profesionales que han participado son el Dr. Ramon Salazar, jefe de oncología médica del ICO Hospitalet, la Dra. Anna Sureda, jefe de Hematología Clínica del ICO Hospitalet, el Dr. Ricard Mesía, jefe de Oncología Médica del ICO Badalona y el Dr. Joan Brunet, jefe de Oncología Médica del ICO Girona.
Por su parte, el Dr. Aleix Prat comenta que "es importante destacar que este ha sido un trabajo colaborativo internacional con participación de centros catalanes y que hemos podido constatar que los factores de riesgo en los pacientes con cáncer y Covidien-19 son similares al resto, y que los tratamientos anitneoplásicos no empeoran su estado, por lo que los podemos continuar aplicando".
Y el Dr. Joan Brunet, jefe de Oncología Médica del ICO Girona, menciona la importancia del trabajo conjunto con el resto de las especialidades del hospital, con el fin de poder atender mejor estos pacientes: "Los resultados del trabajo refuerzan las decisiones clínicas que tomamos en relación con la continuidad de los tratamientos oncológicos. Los resultados de este trabajo nos serán muy útiles para protocolizar estos tratamientos".
Por lo tanto, los datos obtenidos han servido también para definir el perfil de aquellas personas con mayor riesgo de presentar un cuadro grave de COVID-19: hombre, mayor de 65 años y con otras comorbilidades, independientemente de su estado oncológico. Estos factores de riesgo son los mismos que se habían identificado en la población general afectada por la COVID-19. Sabiendo esto, es posible estratificar mejor el riesgo, lo que permite poner el foco de protección en esta población que está en mayor riesgo durante la pandemia. Los meses vividos durante la crisis sanitaria de la COVID-19 han obligado a los profesionales de los servicios de Oncología a hacer un notable esfuerzo para proporcionar una atención de la máxima calidad a los pacientes con cáncer a partir de la información de la que se iba disponiendo.
Los datos que se han obtenido de este estudio ofrecen una información muy importante para el manejo de los pacientes oncológicos y ayudan a revelar muchas de las incógnitas sobre cómo les puede afectar la COVID-19. El estudio publicado ahora sólo es el primero y está previsto que en breve puedan extraerse más conclusiones. "Estamos intentando ver cómo la COVID-19 afecta a otros grupos de pacientes, no sólo a los que ya habíamos identificado como los que tienen los factores de riesgo más importantes. Al tratarse de un proyecto que sigue en marcha, esperamos continuar obteniendo nueva información que pueda ser de gran utilidad. Así, por ejemplo, un próximo estudio analizará los resultados de las pacientes con cáncer de mama", concluye el Dr. Juan Aguilar.
Referencia del estudio:
Clinical portrait of the SARS-CoV-2 epidemic in European cancer patients.
David J Pinato, Alberto Zambelli, Juan Aguilar-Company, Mark Bower, Christopher CT Sng, Ramon Salazar, Alexia Bertuzzi, Joan Brunet, Ricard Mesía, Elia Seguì, Federica Biello, Daniele Generali, Salvatore Grisanti, Gianpiero Rizzo, Michela Libertini, Antonio Maconi, Nadia Harbeck, Bruno Vincenzi, Rossella Bertulli, Diego Ottaviani, Anna Carbó, Riccardo Bruna, Sarah Benafif, Andrea Marrari, Rachel Wuerstlein, Maria Carmen Carmona-Garcia, Neha Chopra, Carlo Alberto Tondini, Oriol Mirallas, Valeria Tovazzi, Marta Betti, Salvatore Provenzano, Vittoria Fotia, Claudia Andrea Cruz, Alessia Dalla Pria, Francesca D'Avanzo, Joanne S Evans, Nadia Saoudi-Gonzalez, Eudald Felip, Myria Galazi, Isabel Garcia-Fructuoso, Alvin J X Lee, Thomas Newsom-Davis, Andrea Patriarca, David García-Illescas, Roxana Reyes, Palma Dileo, Rachel Sharkey, Yien Ning, Sophia Wong, Daniela Ferrante, Javier MarcoHernández, Anna Sureda, Clara Maluquer, Isabel Ruiz Camps, Gianluca Gaidano, Lorenza Rimassa, Lorenzo Chiudinelli, Macarena Izuzquiza, Alba Cabirta, Michela Franchi, Armando Santoro, Aleix Prat, Josep Tabernero and Alessandra Gennari
Cancer Discov July 31 2020 DOI:10.1158/2159-8290.CD-20-0773