El artículo en Molecular Biology of the Cell demuestra como el transporte y la distribución intracelular de colesterol en las células juega un papel central en la regulación del proceso de secreción de proteínas. La principal vía de secreción de moléculas de la matriz extracelular es a través de vesículas que se originan en el aparato de Golgi y que finalmente se fusionan con la membrana plasmática expulsando su contenido al espacio extracelular. Uno de los tipos de proteínas que configuran estas vesículas son las llamadas v-Snares. Los investigadores del IDIBAPS y la Universidad de Barcelona han demostrado que si se altera la llegada de colesterol al aparato de Golgi se bloquea selectivamente el transporte de salida de vesículas hacia la membrana celular. Esta observación se ha hecho manipulando los niveles de colesterol de la célula y analizando los cambios en la localización a nivel nanométrico de un subgrupo de proteínas t-Snares mediante microscopia de super-resolución (TIRFM y STED). Se trata pues de un mecanismo finamente regulado en el que el colesterol juega un papel más importante lo que se pensaba.
Por otro lado, el trabajo en EMBO Journal, encabezado desde el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares de Madrid y en colaboración con la Dra. María Calvo, responsable de la unidad de microscopía confocal de los Centros Científicos y Tecnológicos de la Universidad de Barcelona, detalla cómo una pequeña modificación química de la proteína Rac1, llamada palmitoilación, tiene un efecto crítico en la adhesión y migración celular. Gracias a la utilización de microscopía de super-resolución (TIRFM) y de sondas lipídicas y microscopía de dos fotones, los investigadores observan que células con la molécula Rac1 modificada (o en células que no tienen Rac1) sufren alteraciones en la migración celular. Se ha identificado, por primera vez, la palmitoilació de Rac1 como un mecanismo clave para su funcionamiento y para la remodelación del citoesqueleto de actina a través de la organización molecular de la membrana. Esta observación, que podría tener implicaciones importantes en procesos como la metástasis, no habría sido posible con las técnicas tradicionales de microscopía óptica.
Los investigadores del IDIBAPS - UB han colaborado estrechamente con otros centros que disponen de las últimas tecnologías de microscopía óptica y de super-resolución en el diseño de los paquetes de software que hacen posible el análisis exhaustivo de las imágenes obtenidas. El tercer y último trabajo, publicado en Nature Protocols, es una colaboración con el Centre for Vascular Research de la University of New South Wales (Sydney, Australia) que detalla el procedimiento a seguir para la cuantificación y estudio de la distribución de lípidos en la membrana celular utilizando Laurdan y microscopía confocal con láser de dos fotones.