La aportación española en este estudio es de considerable importancia. Un equipo multidisciplinar de preventivistas, ginecólogos y epidemiólogos de tres hospitales de Madrid (Hospital Clínico San Carlos, Hospital de Móstoles y Hospital Santa Cristina) y tres centros barceloneses (Hospital Clínic, Institut Català d’Oncología y Hospital Vall d’Hebron) han participado en el estudio.
Los resultados demuestran que la vacuna proporciona una eficacia frente a lesiones precancerosas (neoplasia intraepitelial de cérvix 2+ o CIN 2+) asociadas a los tipos 16 ó 18 del VPH del 92,9% en un primer análisis. Se alcanza el 98% en un análisis posterior descartando las infecciones múltiples y una vez identificado el tipo de VPH causante de la lesión. En la publicación los autores destacan que esta vacuna es, además, eficaz frente a lesiones asociadas a tipos de VPH no incluidos en la vacuna. Esta eficacia adicional frente a tipos no vacunales podría traducirse en una protección extra de entre el 11 y el 16% frente al cáncer de cérvix, además de la protección del 70% conferida por la eficacia frente a los tipos 16 y 181. En el estudio se confirmó, utilizando distintas variables tanto virológicas como histopatológicas, que este efecto fue debido principalmente a la protección frente a los tipos 31, 33 y 45 del VPH.
Esta vacuna ofrece la posibilidad de reducir de manera considerable la incidencia de lesiones precancerosas de cérvix, de cáncer de cérvix, así como de los procedimientos diagnósticos y de tratamiento quirúrgico asociados a estas lesiones. Según los especialistas, los resultados reafirman la confianza en la vacunación como medida preventiva primaria frente al cáncer de cérvix cuando se utiliza junto con el cribado (realización de citologías).
En el estudio, la tasa de acontecimientos adversos graves y de enfermedades clínicamente relevantes en el grupo vacunado con Cervarix® fue similar a la del grupo control. Por tanto, los datos de seguridad obtenidos en el mayor ensayo clínico con una vacuna frente al cáncer de cérvix, confirma el buen perfil de seguridad de Cervarix®, siendo de forma general una vacuna segura y bien tolerada.