Los fondos obtenidos por Aelix Therapeutics se utilizarán para completar el equipo e impulsar el desarrollo del inmunógeno HTI, su principal producto, como vacuna terapéutica para el tratamiento de la infección por VIH. HTI ha sido desarrollado en el marco del programa HIVACAT, programa catalán para el desarrollo de una vacuna efectiva para el VIH e integrado por el Servicio de Enfermedades Infecciosas y Sida del Hospital Clínic de Barcelona y el IrsiCaixa. La investigación de HIVACAT se ha llevado a cabo de manera coordinada con ESTEVE, con el apoyo de la Obra Social “la Caixa”, de los Departamentos de Salud e Innovación y Universidad y Empresa de la Generalitat de Catalunya, de ICREA y de la Fundació Clínic.
El inmunógeno HTI, tiene el potencial de convertirse en la primera inmunoterapia capaz de controlar y/o curar la infección por VIH de manera eficiente. Ha sido diseñado para provocar una respuesta del sistema inmunitario del paciente similar a la que, de forma espontánea, producen algunas personas portadoras del virus que consiguen mantener la infección controlada sin necesidad de medicamentos antirretrovirales, conocidos como “controladores de élite”. La vacuna HTI genera una potente respuesta inmunitaria mediante la cual las células T del sistema inmunitario reconocen las células infectadas por el virus y las eliminan. Esto representa un gran avance y un claro cambio de rumbo respecto a las investigaciones llevadas a cabo hasta la fecha.
Los ensayos clínicos comenzarán a finales de 2016 con un estudio de seguridad en personas no portadoras del virus, y posteriormente incluirán estudios de eficacia en pacientes infectados.
Acerca del virus del VIH
Actualmente, más de 36,9 millones de personas son portadoras de VIH en el mundo, con 2 millones de nuevas infecciones sólo en 2014. En España se estima que hay unas 150.000 personas infectadas, 33.600 de ellas en Catalunya. En los últimos años se ha detectado una estabilización en el número de nuevos casos en Europa occidental, debido en parte a cierta relajación en la prevención debido a la existencia de los medicamentos antirretrovirales, que permiten cronificar la enfermedad. Los tratamientos, sin embargo, tienen una toxicidad a largo plazo, por lo que es esencial la investigación de nuevas terapias que permitan la interrupción de la medicación de por vida.