El insigne hepatólogo, colega y compañero del Servicio de Hepatología del Clínic Dr. Miquel Bruguera fue el encargado de hacer una glosa de la figura del Dr. Rodés. Comenzó presentando al homenajeado como "mentor y amigo durante 20 años" y como científico hecho a sí mismo. El Dr. Bruguera destacó el impulso y la importancia que, primero desde la Unidad de Hepatología del Clínic (creada en 1967) y luego desde el Servicio de Hepatología del mismo centro (creado en 1972), el Dr. Rodés dió a la investigación sobre las enfermedades hepáticas y a la formación de los miembros del Servicio, con la creacion de las becas predoctorales para los residentes y con el establecimiento de los "años sabáticos", financiados por los propios médicos del hospital, para que los profesionales del Clínic pudieran dedicarlo a la investigación y a su formación. Estas medidas llevaron al Servicio de Hepatología del Clinic y a sus profesionales a la primera línea mundial en el conocimiento de las enfermedades hepáticas. Y todo ello lo consiguió el Dr. Rodés, en palabras del Dr. Bruguera, "siempre con una gran gentileza en su trato personal".
Después de las palabras de presentación del Bruguera, el Secretario del Govern de la Generalitat Jordi Baiget hizo lectura del Decreto por el cual se otorga la Medalla de Oro al Dr. Joan Rodés y en donde se resume, en pocas palabras, toda una vida de trabajo y tenacidad, de asistencia, investigación, docencia, producción científica y de nombramientos, premios nacionales e internacionales y reconocimientos a la gran labor del homenajeado en pro del conocimiento de las enfermedades hepáticas.
Tras recibir la Medalla de Oro de manos del President de la Generalitat Artur Mas, el Dr. Joan Rodés hizo un breve discurso en el que agradeció al Govern la concesión del galardón, -"el más relevante que puede recibir un catalán", en sus propias palabras- y expresó su satisfacción por el hecho de haberlo recibido asociado a dos personas de relevancia especial como son la Sra. Neus Català, por su larga lucha en pro de las libertades, y Josep Maria Espinàs, del cual dijo que "le he estado leyendo a lo largo de toda mi vida". Tuvo palabras de agradecimiento para los antiguos compañeros de Unidad Miquel Bruguera, Josep Gené, Josep Maria Bordes, Vicente Arroyo y José Maria Sánchez-Tapias, y especialmente para su esposa Paula, con la que lleva 50 años de vida en común "desde que volvimos de París, donde nos conocimos en la Cité Universitaire". El Dr. Rodés hizo mención también de los profesionales del servicio actual de Hepatología del Clínic, que mantienen el alto nivel alcanzado por el grupo inicial de 6 jovenes médicos: "actualmente la situación és igual, han cambiado las personas pero perduran las ideas y la filosofía de trabajo", y quiso compartir la Medalla de Oro recibida con todos y cada uno de los miembros de aquella primera Unidad de Hepatología.
Crédito imágenes: Generalitat de Cataluña.