Las enfermedades crónicas del hígado son muy comunes y se han convertido en un problema de salud a escala mundial. La cirrossi hepática es una de las 12 causas principales de muerto a nivel mundial, además de ser responsable de un gran número de ingresos hospitalarios y de reducir la esperanza de vida de la población. La mayoría de los pacientes se diagnostican tarde dado que la enfermedad es asimptomática hasta sus últimas etapas. En la actualidad el paciente va a la consulta médica cuando sufre molestias y síntomas como descompensaciones hepáticas o cáncer de hígado.
Los estudios demuestran que el 6-7% de la población adulta sin enfermedad hepática conocida tiene fibrosi hepática, sobre todo asociada al hígado graso no alcohólico provocado por la obesidad y la diabetes. En este artículo, en que han participado profesionales de 6 países europeos, se propone evaluar la implantación de programas de cribado para detectar la fibrosis en el hígado en las primeras etapas y evitar su progresión. Métodos de diagnóstico no invasivos, como la elastografía transitoria, que determina el grado de rigidez del hígado, o los biomarcadors en sangre, podrían ser útiles en la detección precoz de las enfermedades hepáticas.
“Se tiene que hacer un cambio. Es muy importante detectar la enfermedad hepática de forma precoz en lugar de esperar que aparezca. Por eso hay que desarrollar y evaluar programas de cribado que supondrían un cambio cualitativo en la práctica clínica”, explica el Dr. Pere Ginès.
Referencia del artículo:
Screening for liver fibrosis in the general population: a call for action
Pere Ginès, Isabel Graupera, Frank Lammert, Paolo Angeli, Llorenç Caballeria, Aleksander Krag, I Neil Guha, S Darwish Murad, Laurent Castera
The Lancet Gastroenterology & Hepatology. Volume 1, No. 3, p256–260, November 2016. DOI: http://dx.doi.org/10.1016/S2468-1253(16)30081-4