¿Cuál es tu vinculación con Ucrania?
Soy hijo de padre catalán y madre ucraniana. Mi padre y mi tío, por diversas circunstancias de la vida, se casaron con dos amigas de la infancia ucranianas que se habían criado en Múnich. Mis abuelos y abuelos de mis primos huyeron de la represión estalinista y fueron a parar a la Alemania de la posguerra. Mi padre y mi madre decidieron venir a vivir a Barcelona. Mi madre decidió que sus hijos tuvieran nombres ucranianos. Con mi madre hablo ucraniano y también se nos ha criado con las tradiciones de allí. Mis abuelos tenían muy claro que no volverían a Ucrania. Mis padres han vuelto de visita y mis tíos tienen una casa allí y viven 6 meses en Barcelona y 6 meses en Ucrania. Ahora, en plena guerra, tenemos familia en Lviv, en el oeste del país, y estamos viviendo con mucha angustia toda la situación actual. Estamos entre la pena y la rabia.
¿Se veía venir?
El conflicto viene de lejos, pero los que conocemos y seguimos la situación de Ucrania hemos visto que ha hecho ‘chup chup’ en los últimos años, sobre todo, desde 2014 con la anexión de Crimea y la situación del Donbass. Ahora ha explotado la situación y Putin ha demostrado que es capaz de cualquier cosa.
"Tenemos familia en Lviv, en el oeste del país, y estamos viviendo con mucha angustia toda la situación actual. Estamos entre la pena y la rabia".
¿Qué noticias te llegan desde Ucrania?
Hablamos todos los días con los familiares a través de la aplicación Signal. Nos dicen sentir alarmas cuando están a punto de bombardear, que ven pasar aviones y todo el mundo está muy tensionado y a la expectativa de que puedan pasar más cosas. En la zona donde están ellos, más cerca de Polonia, la situación todavía es bastante tranquila. A día de hoy, Rusia todavía no ha podido conquistar ninguna gran ciudad, pero sí que cada vez van existiendo más focos de combate y esto hace que la situación sea muy tensa y complicada. Es una invasión a gran escala. La familia de los primos de mi madre están todos ahí. Tanto hombres como mujeres.
Las mujeres pueden irse y los hombres deben quedarse. Es así, ¿no?
Es una imagen escalofriante ver cómo familias enteras llegan a la frontera y los hombres se quedan en Ucrania porque no pueden salir. También hay mujeres que han estado combatiendo en el Donbass y también hay mujeres que pasan la frontera para dejar a sus hijos con familiares de Polonia y vuelven a entrar para añadirse al frente.
Incluso hemos conocido testimonios de ucranianos, a través de los medios de comunicación, que viven en diversas partes del mundo que han decidido ir al frente...
Si se plantea, en un momento determinado, alguna acción humanitaria en la frontera me gustaría poder ir. La sensación de impotencia es total. A mí me han educado con la cultura de este país y el sentimiento de pertenencia es muy alto a pesar de que nunca he puesto los pies.
Las muestras de solidaridad se han multiplicado en estos días. ¿Cómo lo estás viviendo?
Se agradecen muchos los mensajes de ánimo. Participo en la concentración que se realiza cada noche en la Plaza Catalunya de Barcelona y estamos intentando organizarnos para poder enviar material hacia allí. Tengo el apoyo de la dirección del Hospital para organizar acciones, siempre en coordinación con el consulado y otras iniciativas solidarias de diversas ONG, como la Cruz Roja y otros hospitales, para ver si podemos ayudar de alguna manera.
"Me gustaría ver algo más de pro actividad y de implicación de la sociedad catalana".
¿La sociedad catalana está respondiendo bien ante esta situación?
Puesto que hay miedo a una tercera Guerra Mundial, y no se quieren enviar tropas ni ejércitos de otros países, se envía armamento. No quiero que haya guerra en ningún sitio del mundo, pero este armamento está sirviendo para que el ejército ucraniano esté aguantando, de momento.
En las concentraciones de Plaça Catalunya es verdad que hay mucha gente ucraniana y me gustaría que la sociedad catalana se implicara un poco más en estas acciones. Aunque estos días muchos compañeros del hospital, amigos... me han enviado muchos mensajes de apoyo y he oído mucho su calor. Me gustaría ver algo más de pro actividad y de implicación de la sociedad catalana.
También me gustaría que la gente, a la hora de opinar, fuera muy prudente. Con la pandemia todo el mundo era epidemiólogo, con el volcán de la Palma todo el mundo era vulcanólogo y es importante tener todo el contexto a la hora de opinar. Rusia y Ucrania son pueblos hermanos y me da una pena terrible ver también cómo los soldados rusos están cayendo y dejan familias huérfanas en Rusia, que la sociedad rusa es víctima de un régimen dictatorial donde no hay libertades, donde los opositores y disidentes son envenenados o se les prohíbe presentarse a las elecciones, donde el conflicto en la parte del Donbass, seguramente el ejército ucraniano ha hecho cosas mal... pero desde Catalunya lo que debemos hacer seguro es evitar comparaciones de lo que ocurre allá y lo que ocurre aquí. Lo que queremos es que pueblos hermanos, como los rusos y los ucranianos, vivan en paz.
¿Conoces el sistema de salud de Ucrania?
Es un sistema público y que como ex-repúblicas soviéticas existe una academia muy buena. Puede que no tengan acceso a grandes tecnologías y grandes fármacos, pero la formación de los médicos es muy buena. Es evidente que nuestro sistema sanitario está en mejores condiciones, y la emergencia sanitaria de una guerra ha hecho saltar por los aires a este sistema. Ahora, si se envía material sanitario a Ucrania no sólo debemos pensar en material sanitario por los heridos de guerra sino también para todas las personas que, por ejemplo, pueden quedarse sin insulina, sin antibióticos...
"Si se envía material sanitario a Ucrania no sólo debemos pensar en material sanitario por los heridos de guerra sino también para todas las personas que, por ejemplo, pueden quedarse sin insulina, sin antibióticos..."
¿Te atreves a decir qué pasará en unos días o unas semanas?
Es muy difícil saber qué va a pasar dentro de una semana. Existen varios interrogantes que veremos resolverse con el paso del tiempo. ¿Pondrán un gobierno títere tutelado por Rusia? Se ha hablado de que querían volver a poner a Víktor Yanukóvich como presidente otra vez -que en mi opinión sería una decisión desastrosa-. Su idea es volver a la situación de antes de la revolución naranja del 2004. Es decir tener, un gobierno pro ruso y amigo de Putin. Un desastre, vaya.
