El nuevo trabajo concluye que el SPECT cerebral detecta cómo los niveles de dopamina en el cerebro bajan rápidamente con el paso de los años en los pacientes con trastorno del sueño REM. Esta técnica de neuroimagen se convierte pues en la primera herramienta para visualizar de forma precoz la progresión de la enfermedad. Todos los trabajos tienen como primer autor al Dr. Alex Iranzo, médico del Servicio de Neurología del Hospital Clínic de Barcelona, ??investigador del Institut d’Investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer (IDIBAPS) y miembro de la Unidad Multidisciplinar de Trastornos del Sueño, y como últimos firmantes al Dr. Joan Santamaría y el Dr. Eduard Tolosa de la misma institución.
El estudio ha consistido en comparar la evolución del SPECT cerebral de 20 pacientes con trastorno de la fase REM y 20 personas control durante tres años. La técnica de neuroimagen consiste en medir la presencia de dopamina en la sustancia nigra, una parte del cerebro relacionada con el aprendizaje y la armonía de los movimientos. En la enfermedad de Parkinson existe un déficit de dopamina en la sustancia nigra y por ello los pacientes tienen temblor, rigidez y lentitud al moverse. Los resultados obtenidos demuestran que durante los 3 años de seguimiento la producción de dopamina en el grupo control se reduce como consecuencia de la edad en un 8% y en el grupo de pacientes con trastorno del sueño REM en un 20%. Una vez finalizado el seguimiento de 3 años, 3 de los 20 pacientes del grupo con trastorno del sueño REM ya habían desarrollado la enfermedad de Parkinson y su déficit de dopamina era del 30%.
De los tres trabajos encabezados por el equipo del IDIBAPS - Hospital Clínic se desprende que hay que centrar los esfuerzos en la creación de fármacos neuroprotectores que eviten la progresión de los pacientes con trastorno de la conducta durante el sueño REM hacia enfermedad de Parkinson. Por primera vez se dispone de una técnica, el SPECT cerebral, para evaluar si estos medicamentos son eficaces. Los autores del estudio proponen que para ser eficaz un fármaco neuroprotector debería evitar que la concentración de dopamina se reduzca más allá del 8% con el paso del tiempo.