Por su su biocompatibilidad, flexibilidad y sus propiedades eléctricas el grafeno puede revolucionar la detección de señales cerebrales. En el proyecto Neurographene un equipo multidisciplinar de investigadores desarrollará matrices de microelectrodos (MEA, de sus siglas en inglés) para mejorarla estimulación cerebral y el registro de la actividad neuronal. Gracias a la versatilidad de este material los científicos creen que, además de resolver los problemas existentes en cuanto al desarrollo e implementación en la práctica clínica de los MEA, puede aportar beneficios adicionales como la compatibilidad con técnicas de diagnóstico por imagen como la resonancia magnética.
Sobre el Grafeno
El grafeno es un material formado por una lámina de carbono de un átomo de espesor que fue obtenido y analizado en Europa y supuso la concesión del Premio Nobel de Física en 2010 a Andre Geim y Konstantin Novoselov, de la Universidad de Manchester. Además de ser el objeto más fino jamás obtenido, es muy ligero y flexible y posee una dureza superior a la del diamante. El proyecto Graphene Flagship, que forma parte de las iniciativas emblemáticas sobre tecnologías futuras y emergentes (FET Flagships), está dotado con más de 1.000 millones de euros a lo largo de 10 años. Gracias a esta iniciativa, Europa lleva las riendas en la carrera mundial para desarrollar las tecnologías derivadas de este material y convertir, así, la investigación científica de vanguardia en productos útiles para la sociedad.
Autor de la imagen del grafeno: AlexanderAIUS