La intervención ha supuesto modificaciones en la configuración de paredes estructurales, con una nueva distribución para lograr la superficie diáfana necesaria en el quirófano por su actividad y, también, la utilización de los materiales de construcción adecuados para este tipo de instalaciones, la protección radiológica del quirófano se ha realizado en paredes mediante ladrillos de hormigón baritado-de densidad muy superior al hormigón convencional-como alternativa al plomo, y el blindaje del techo en base a planchas de acero.
Como materiales de acabado para el revestimiento de paredes de la zona, se ha combinado el laminado de material de resinas fenólicas y un recubrimiento vinílico tipo Vescom, el primero de gran resistencia a los impactos y ambos con componentes fungicidas. Por otra parte, el suelo se ha recubierto de pavimento vinílico "Tarkett", de tipo conductivo en la zona del radioquiròfan para una mayor seguridad y protección de los pacientes.
Asimismo, se ha dotado de un sistema de videoconferencia para poder retransmitir intervenciones dentro y fuera del hospital, y se ha implementado un sistema de audio para poder emitir y recibir la voz del facultativo, que posibilitará sentir por la megafonía general del quirófano la música almacenada en dispositivos móviles tipo Ipod.
Este importante proyecto se inició en septiembre de 2011, con una primera fase de intervención en el área del antiguo radioquiròfan-entre las escaleras 7 y 9 de la primera planta del hospital-con el objetivo de adecuar los espacios a las necesidades, en cuanto a nuevas oficinas y servicios, del personal del área administrativa del ICN que se tenía que trasladar. Posteriormente, se procedió a la construcción de la nueva área del radioquiròfan en los nuevos espacios disponibles.