Hay una relación directa entre consumo de alcohol durante el embarazo y efectos adversos en la gestación y en el desarrollo fetal y del recién nacido. Los recién nacidos que hayan sido expuestos pueden sufrir discapacidades físicas y cognitivas, así como problemas de conducta y de aprendizaje, y, a menudo, se pueden dar varias afectaciones vez. Todos estos problemas, sin embargo, son 100% prevenibles no bebiendo nada de alcohol desde el momento en el que se planifica el embarazo o dejarlo de hacer en cuanto se confirme.
La prevalencia del conjunto de manifestaciones que pueden producir el TEAF se estima que está entre 9 y 10 de cada 1.000 recién nacidos. En cualquier caso, se trata de un trastorno infradiagnosticado. Datos obtenidos mediante matrices biológicas, en concreto cabello de la madre, muestran que un 40% de las mujeres embarazadas de nuestro entorno consumen alcohol en algún momento durante el embarazo. Además el aumento de adopciones de niños procedentes de países donde la población consume cantidades elevadas de alcohol es un factor que incrementa la prevalencia.
El Grupo de Investigación Infancia y Entorno (GRIE) es en la actualidad el único grupo de investigación clínica y básica conjunta sobre el TEAF en España y está bajo el paraguas de BCNatal, un centro de referencia nacional e internacional en medicina materno-fetal que es fruto de la unión del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona y del Hospital Clínic-Maternitat. Estos dos hospitales han puesto en marcha la creación de una unidad experta en TEAF que comenzará a funcionar próximamente.
Desde el Clínic se llevan varios proyectos de investigación clínica y básica relacionados con la exposición prenatal al alcohol y sus efectos en el neurodesarrollo de los recién nacidos y los niños expuestos: estudio de prevalencia del TEAF en el colectivo de niños adoptados de países de Europa del Este (en colaboración con el Hospital Sant Joan de Déu y el Hospital de la Vall d'Hebron); seguimiento y estudio de efectos epigenéticos y de daño sobre el neurodesarrollo en una cohorte de niños con TEAF; estudios de biomarcadores de daño en modelos animales de rata (en colaboración con el Hospital Sant Joan de Déu) y de pez cebra; y estudios clínicos con candidatos terapéuticos (antioxidantes) en niños con TEAF, entre otros.