Cita de Jordi Gracia-Sancho, Group leader (R4)
Conocer las bases moleculares y celulares de las enfermedades del hígado es la única forma de llegar a desarrollar tratamientos seguros y eficaces

Investigación actual

Problema

Las enfermedades del hígado representan un grave problema social, con un peso sanitario equiparable al de las enfermedades respiratorias. Como ejemplo, en los últimos diez años la enfermedad hepática crónica, también conocida como cirrosis, ha provocado la muerte de más de 35.000 hombres y 10.000 mujeres en el territorio español.

Las células que forman parte de los vasos sanguíneos del hígado, principalmente células endoteliales sinusoidales, células estrelladas y macrófagos residentes, juegan un papel clave en el desarrollo y la progresión de las enfermedades del hígado. Por lo tanto, pueden ser dianas terapéuticas a tener en cuenta para el tratamiento y la mejora de los pacientes con daño hepático.

Aproximación

El grupo estudia los procesos moleculares y biomecánicos que regulan el estado y la función de estas células sinusoidales, así como los mecanismos de comunicación intercelular hepática en situaciones de salud, en respuesta al daño hepático agudo, en la enfermedad hepática crónica (cirrosis y esteatohepatitis) y en el envejecimiento.

Los resultados que se obtienen se aplican para descubrir nuevas dianas terapéuticas y desarrollar nuevas terapias que mejoren la microcirculación, la fibrosis y la funcionalidad del hígado. Para ello el grupo utiliza un amplio abanico de métodos experimentales, que incluyen tejidos y células primarias (de humanos o de roedores), modelos de enfermedad hepática in vivo e in vitro, cocultivo celular mediante tecnología liver- on-a-chip y análisis masivo de datos ómicos, entre otros.

Impacto

El grupo ha descubierto el eje autofagia-KLF2 como un mecanismo clave en la regulación de la salud celular hepática. Es un hallazgo que lleva a proponer el uso de las estatinas, que activan este eje, como componentes para el tratamiento de la cirrosis, tanto en fases iniciales como en muy avanzadas.

En el campo del envejecimiento ha descrito los cambios que sufre la microcirculación del hígado en situaciones de vejez, tanto en la salud como ante un daño hepático agudo y durante la enfermedad hepática crónica. Estos avances han permitido demostrar que el agente protector simvastatina sería útil en la subpoblación de pacientes de más edad.

Por último, en el campo de nuevas tecnologías, ha desarrollado el primer hígado humano en un chip. Esta innovación ya se ha transferido a una empresa y, por tanto, se ha puesto al servicio de la sociedad.